Afectados de Tierra de Biescas por el soterramiento de una linea de alta tensión entregan más de 700 alegaciones | LORENA CAJAL

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Ganaderos, agricultores y vecinos de Tierra de Biescas --que también incluye Oros Alto, Oros Bajo y Oliván-- afectados por el soterramiento de una línea de alta tensión han entregado 720 firmas de apoyo a las alegaciones en contra de este proyecto de evacuación de energía que generaría un macroproyecto fotovoltaico pendiente de resolución.

La entrega ha tenido lugar este lunes, 14 de noviembre --último día hábil para presentarlas-- ante el registro de la Delegación Territorial del Gobierno de Aragón en Huesca, en la plaza Cervantes.

La mayoría de las rúbricas se han recogido este fin de semana en la mesa informativa, que se ha instalado en la plaza del Ayuntamiento de Biescas y alrededor de 360 de la charla informativa que tuvo lugar el primer fin de semana de noviembre para dar a conocer la publicación en el Boletín Oficial de Aragón (BOA) del proyecto promovido por una empresa radicada en Madrid, en la misma dirección postal que otros dos proyectos entre Senegüé y Sabiñánigo y entre Sabiñánigo y Jaca, a los que se suman otro en el entorno de la ciudad jaquesa.

Asimismo, se han adjuntado a las mas de 50 alegaciones rubricadas por los ganaderos y agricultores de la Tierra de Biescas, porque las afecciones de la línea de alta tensión perjudicarían su medio de vida, cuando no hacerlo inviable, aparte de los daños medioambientales.

En Biescas, son cerca de veinte de propietarios de terrenos que estarían afectados por esta línea de alta tensión; en Orós serían la mitad; y una cifra similar en Oliván.

En total, son unas 150 parcelas que se verían afectadas por el trazado, ya que se tendría que cavar una zanja por donde iría la línea de alta tensión, además de una zona de cámara de empalme, y también se prevé una ocupación temporal de tres metros a cada lado desde el borde de la canalización.

Alegaciones

En concreto, la alegación que se ha suscrito es en contra de la modificación de proyecto de infraestructura de evacuación compartida compuesta por la Subestación Eléctrica Trasformadora (SET) Sierra Plana 1 220/30 kilovatios y Línea subterránea de Alta Tensión (LAAT) Sierra Plana 1 SET Biescas en 220 kw en los términos municipales oscenses de Sabiñánigo y Biescas.

Éste es uno de los tres proyectos que han presentado las empresas 'Solar Alto Gállego, S.L.'; 'Meseta y Sol, S.L.'; y 'Montaña Solar, S.L.', las tres con el mismo domicilio en la calle Goya 6, planta 2, de Madrid. De los tres proyectos, los de mayor potencia son los dos primeros de Biescas-Sabiñánigo y Jaca-Sabiñánigo, cada uno de 220 kw, y el tercero en el término municipal de Jaca, es de 30 kw.

Otra alegación técnica que también se ha presentado considera que el soterramiento previsto «es de poco rigor» ya que los requisitos serían «mucho más exigentes, si la línea de alta tensión discurriera por la carretera», ha indicado una de las afectadas de Biescas por este proyecto, Maite Cotí.

En declaraciones a Europa Press, ha explicado que están «bastante esperanzados en que las alegaciones fructifiquen y no se autorice ni la línea de alta tensión, ni el macroproyecto de paneles solares».

El año pasado la línea de alta tensión era aérea y ahora los promotores buscan soterrarla, pero «se desconoce el motivo de este cambio de intenciones y qué pretenden porque la diferencia son 12 millones de euros de una a otra y, en caso de que prospere, el proyecto lo pagarán los vecinos», ha augurado.

«Estos proyectos --ha observado-- salen como setas con dinero de Europa y vienen arrasando, pero aquí no las necesitamos porque una de cada tres casas están vacías en invierno».

«La gente de estos pueblos --ha relatado Cotí-- está animada y tienen ganas de salir y dar a conocer su opinión. Están expectantes» con el resultado que tengan las firmas de apoyo a las alegaciones.

Para el 10 de diciembre, quieren convocar una manifestación con tractores por un tramo de la carretera nacional, del puente de Oliván a Biescas, para lo que han tramitado el permiso preceptivo ante la Subdelegación del Gobierno en Huesca. Ya tienen ideado el lema que sería: «Pirineo cuidado, pero no petado».

También barajan en enviar una carta al presidente del Gobierno de Aragón, Javier Lambán, y contactar con los vecinos del valle de Tena en acciones conjuntas porque «también están interesados en movilizarse».

Alegaciones

Ente los argumentos para rechazar el proyecto se esgrime que en el expediente no figura el modo en el que la promotora prevé obtener el derecho a disponer de las fincas afectadas para lo que no se ha firmado ningún acuerdo y dicho acuerdo «no podrá formalizarse puesto que la finca es imprescindible para la explotación económica agrícola o ganadera que constituye el medio de vida» del afectado.

Por ello, piden que el trazado se traslade a fincas con las que la promotora haya obtenido algún acuerdo con su propietario o a terrenos de titularidad pública y, en su defecto, que sea de conformidad con el Derecho Civil Foral Aragonés, de modo que la línea a su paso por la finca del firmante «permita el paso de la maquinaria necesaria para tareas agrícolas o ganaderas y con profundidad suficiente para arar».

En la segunda de las nueve alegaciones, se dice que la promotora no ha respetado las limitaciones legales a la construcción de servidumbres de paso. Antes de plantear la imposición de servidumbre sobre fincas de particulares, la promotora debe descartar en el estudio de alternativas la existencia de paso por terreno públicos.

La ausencia de utilidad pública que justifique la expropiación de fincas es otra argumentación ya que el proyecto consiste en una planta fotovoltaica privada y una línea privada de evacuación no de transporte o distribución por lo que «no presta servicio público, sino que solo sirve a intereses particulares de la promotora».

Otro argumento es que el estudio de impacto medioambiental «reconoce» que parte del trazado atraviesa suelo dedicado a la actividad ganadera «que es de alta relevancia cultural en la zona y, además, está protegida con la figura de la Reserva de la Biosfera Ordesa-Viñamala».

La actividad agraria y ganadera es seña de identidad de la zona y conforma su paisaje y medioambiente, que son el motor del turismo, por lo que existe un «interés público en no alterarlas en beneficio de actividades privadas».

En la cuarta alegación, se aduce ausencia de documentación preceptiva, falta de notificación personal e indefensión. La quinta se refiere al fraccionamiento del proyecto de más de 20 kilómetros en dos segmentos inferiores a los 15 kilómetros para que sea sometido al procedimiento simplificado, menos riguroso, que el ordinario.

La sexta alegación critica la justificación de la ubicación ya que la alternativa escogida afecta a terrenos de «elevada utilidad agraria» que han sido objeto de inversiones públicas y privadas, como riegos concentración parcelaria, que se malograrían.

En la séptima, se indica que en caso de extinción de la servidumbre la promotora deberá retirar la instalación y reponer el terreno a su estado actual, pero en el presupuesto no se prevé cumplir esta obligación, ni se garantiza en modo alguno.

La octava tilda de «inaceptable» el impacto medioambiental con las múltiples afecciones que ocasionaría, como los impactos electromagnéticos, puesto que las fincas por las que pasaría la línea es el lugar de trabajo del afectado. Asimismo, en los 2.207 metros se atravesarían bosques, que son hábitat de especies en extinción, vías pecuarias y Zonas de Especial Conservación (ZEC).

La afectación al paisaje y al patrimonio histórico es la última alegación porque aunque se soterre la línea, la planta fotovoltaica permanece visible desde Oliván y no se evalúa correctamente la afección a varias iglesias, algunas mozárabes, lo que infringe la Ley del suelo.