Las reuniones en Bruselas se dieron con altos representantes de las instituciones comunitarias y miembros de entidades sindicales y ecologistas. | Ultima Hora

La presidenta del Govern, Francina Armengol, acompañada por el conseller de Modelo Económico, Turismo y Trabajo, Iago Negueruela, mantuvieron el pasado año diversas reuniones en Bruselas con altos representantes de las instituciones comunitarias y miembros de entidades sindicales y ecologistas, a quienes trasladaron los detalles de la nueva ley turística de las Islas Baleares. Una normativa que exige a las empresas medidas pioneras en sostenibilidad medioambiental y derechos laborales, y con la que se pretende que la comunidad autónoma continúe liderando el turismo gracias a toda una serie de transformaciones que lleven al destino a ser plenamente sostenible y circular.

Sistemas de ahorro de agua, respeto al producto local, limitación del plástico y el papel, entre otras medidas

Durante los encuentros, que citaron a la comisaria europea de Transportes, Adina Vălean; al comisario europeo de Empleo y Derechos Sociales, Nicolas Schmit; y a la directora general de Turismo comunitaria, Valentina Superti (responsable de turismo de la Dirección General de Mercado Interior, Industria, Emprendimiento y Pymes de la Comisión Europea), tanto Armengol como Negueruela desgranaron las principales características de la nueva normativa y las novedades laborales que incluye en beneficio de todos los trabajadores y trabajadoras de las Islas.

Principales aspectos expuestos

Entre las principales novedades que se expusieron, destacan la necesidad de implementar camas elevables en las habitaciones para evitar enfermedades laborales de las camareras de piso, así como sistemas de ahorro de agua y limitación de plástico y papel, o el respeto al producto local con la trazabilidad de alimentos de las islas. En esta línea, Armengol defendió la importancia de una normativa turística como la impulsada por el Govern, que sitúa el bienestar de los trabajadores en el centro de la industria turística.

La respuesta por parte de todos los representantes comunitarios fue muy positiva ante la iniciativa de las Islas Baleares y mostraron su respaldo a la nueva normativa turística. Destacaron el compromiso valiente de las Baleares por defender y salvaguardar los derechos de los trabajadores y asumir el reto de lograr un turismo más sostenible y respetuoso con el medio ambiente. Armengol explicó que «hemos tenido la oportunidad de trasladar que las Baleares no son solo un territorio al que la gente va de vacaciones, sino también un lugar muy comprometido con los derechos sociales y la protección del entorno», además de ser una región europea que «necesita de políticas transversales en materia insular porque tenemos dificultades que son evidentes de competitividad de nuestras empresas y de perjuicio en derechos para nuestros ciudadanos». Asimismo, aprovechó para destacar el paquete de políticas autonómicas impulsadas en las Islas Baleares para avanzar en la sostenibilidad social, económica y ambiental.

El secretario general de la Confederación Europea de Sindicatos alabó la normativa turística balear

En esas reuniones, Francina Armengol concertó diversos encuentros con representantes de entidades ecologistas, representantes sindicales, el embajador de España ante la Unión Europea y jóvenes de las Islas Baleares que trabajan actualmente en las instituciones europeas. Con todos ellos la acogida de la nueva normativa turística balear fue muy positiva. Precisamente, tras la reunión con los representantes sindicales, el secretario general de la Confederación Europea de Sindicatos, Luca Visentini, alabó la nueva normativa turística balear y destacó que «se trata de una iniciativa pionera en Europa, que se complementa con la reforma laboral recientemente aprobada por España, que introduce más estabilidad y reduce la precariedad en el mercado laboral». «El sector turístico es uno de los más importantes para la economía europea, y ha estado muy afectado por la pandemia, por eso es muy importante relanzarlo, en base a la sostenibilidad para el futuro», declaró poco antes de mostrar su apoyo a la normativa turística balear, «que puede convertirse en un ejemplo para otras regiones europeas».