El chef y su equipo trabajan dando lo mejor de sí mismos en cada servicio. | Fontsanta Hotel

La temporada ha empezado pronto para Jhonatan Maldonado, apenas han salido los primeros días primaverales, pero el restaurante del Fontsanta Hotel Thermal Spa & Wellness está trabajando a pleno rendimiento. El sueño del chaval, venido desde Chile con su familia cuando era un crío, se ha hecho realidad y la cocina ha dejado de ser una ilusión para convertirse en su profesión.

Desde sus inicios en la Escola d’Hoteleria, haciendo prácticas con Arsenio Fuentes en el Mhares, uno de sus mentores, o en una pizzería cercana a Cort, han pasado ya varios años. Años que le han servido para entrar en contacto con los productos y la cocina mediterránea que se practica en Mallorca, y años que le han permitido rodearse de un equipo de cocina que permanece estable desde hace más de cinco años. «No fueron inicios fáciles, salía poco y cuando lo hacía dejaba el dinero en casa para no gastar porque yo me pagaba la matrícula en la escuela, fueron tiempos de aprendizaje de la cocina y de la vida».

Sus platos son mediterránios, locales, pero sus raíces chilenas le hacen reinventar recetas.

Exigencia al máximo nivel
A sus 33 años se ha curtido al lado de Igor Rodríguez, Mario Sandoval o Fernando Pérez Arellano. Ha pasado por el Hyatt y se ha impregnado de todos ellos. «El nivel de exigencia de cada uno de ellos me ha servido para formarme como cocinero y como un jefe de cocina, que trabaja para dar lo mejor de sí mismo en cada servicio».

Su cocina está marcada por el producto, la temporada y por la mezcla de sabores sin confundirlos. «Procuro emplear la materia prima más cercana, aunque si tengo que recurrir a una buena carne de fuera, también lo hago». Sus platos son mediterráneos, locales, pero sus raíces chilenas le hacen reinventar recetas. Sus recuerdos de viajes o la poesía de Pablo Neruda son parte de su inspiración. Dirige los fogones del hotel desde 2018, con un equipo de quince personas en cocina y quince más en sala. «Es un reto dar un servicio de calidad al hotel y al restaurante. Son horarios muy largos y de alta exigencia».

Cercano a Es Trenc y a La Colònia de Sant Jordi, Maldonado abre la cocina del hotel para que huéspedes y residentes puedan disfrutar sus platos. Tanto la presentación, como la calidad de los productos y el cuidado de los sabores demuestran que los sueños se pueden cumplir. Un sueño que sin duda está presente en el menú que presenta para Cocinas y cocineros con alma, disponible hasta el 30 de abril, y que puede reservarse en ultimahora.es, o en la plataforma de venta, accediendo mediante el código QR que aparece en los anuncios de la promoción.