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El Real Mallorca afronta hoy el último día de trabajo efectivo en Holanda con la disputa del último encuentro amistoso ante el Cambuur Leeuwarden, de la Primera División holandesa. El miércoles la expedición dedicará el día a viajar y posteriormente a preparar la segunda fase de la pretemporada.

Pero hoy finaliza el primer tramo que empezó día 5 en Palma y que 19 días después deja ciertas conclusiones, algunas positivas y otras no tanto. El equipo vuelve con una idea más o menos clara de lo que visualiza José Luis Oltra de lo que tiene que ser el patrón de juego y en ese punto se ha trabajado mucho y por lo tanto se ha avanzado en el estilo y la personalidad por la que debe regirse el equipo balear.

No obstante, existen excesivas lagunas tanto a nivel futbolístico como también en el capítulo de asuntos que todavía no están resueltos y que seguramente tardarán todavía en cerrarse. El trabajo en los despachos está hecho solo a medias y faltan futbolistas por venir y también algunos terminarán abandonando el equipo de aquí a mediados de agosto, que es cuando empieza la temporada. Incluso no es descartable que se apure el plazo hasta final de agosto, que es cuando finaliza el mercado de verano. No sería la primera vez que con la competición en marcha, el club afronta operaciones importantes, sin ir más lejos, el trapaso de De Guzman al Villarreal.

En las notas positivas destaca especialmente las buenas sensaciones que desprende Tomas Teye, el centrocampista cedido por el Atlético de Madrid y que está protagonizando una adaptación vertiginosa. Su presencia permitirá aumentar las alternativas en la zona ancha y dar oxígeno a Pep Lluís Martí. En ambos casos se trata de futbolistas con una alta capacidad para ayudar en defensa y esa misión recaerá seguramente la próxima temporada sobre estos dos jugadores.

El futbolista procedente del filial rojiblanco está ofreciendo una muy buena presisposición al trabajo, exhibe fuerza y músculo y se está ganando la confianza de José Luis Oltra.

Gerard Moreno y Alex Moreno también son dos de los puntos positivos que deja el stage. En principio ni uno ni otro están llamados a ser titulares en las primeras jornadas, pero no van a permitir muchas alegrías a quienes partan de inicio y todo indica que serán dos recursos muy importantes en una temporada muy larga y cargada de partidos. Ambos están respondiendo muy bien, aunque en condiciones normales Víctor Casadesús está situado un par de posiciones por delante de Gerard y Alex puede estar a caballo entre el filial y el primer equipo. Agus todavía tendrá que esperar para encontrar su espacio.

En estos momentos Javi Márquez es el mediocentro de carácter creativo que cuenta con la absoluta confianza de su entrenador. Ha jugado muchos minutos en los cuatro amistosos disputados en Holanda y si finalmente se queda en la Isla, será la brújula que necesita el equipo en la zona ancha.

Sin embargo, se trata de un futbolista con una ficha muy elevada y que será complicado mantener en el Mallorca. El club lo intentará, pero el condicionante económico marcará su futuro. Sin embargo, en esta pretemporada él y Alejandro Alfaro se están mostrando como los dos futbolistas con mayor capacidad para desnivelar un marcador, para sorprender y eso en el fútbol es un asunto capital y más si el objetivo es acender de categoría.

La visión del primero y la capacidad de finalización del segundo elevan muchísimo el nivel de calidad del equipo. También un punto positivo ha sido el estado de forma de Rubén Miño, que en los partidos que ha participado ha firmado muy buenas actuaciones. Aouate no lo tendrá fácil esta campaña.

Precisamente lo peor del stage no está localizado en lo puramente deportivo, sino en conocer si Márquez y Alfaro van a continuar en el primer equipo. Una cosa son las intenciones de ambos jugadores -los dos han manifestado que quieren quedarse- y otra las posibilidades que el club tiene de que finalmente se queden. Todo puede ocurrir de aquí a que finalice el mes de agosto.

Por otra parte existe un asunto también importante y que es imprescindible solucionar con urgencia: la situación de Michael Pereria. Al margen de la importancia del jugador a nivel deportivo, el futbolista ha manifestado que quiere dejar el club balear y es necesario orquestar una solución porque la situación actual no es buena para nadie. Se puede finalmente forzar que Michael se quede porque las condiciones del mercado no son nada favorables y será difícil que pueda llegar una oferta que llene los deseos del club.

También el trabajo en Holanda ha dejado una nota negativa, la lesión de Víctor, que le ha impedido brillar con luz propia, aunque no hay que olvidar que marcó el gol de la victoria en el último partido amistoso que jugó el equipo balear frente al Lokeren. El jugador ha ido de menos a más.

Respecto al libro de estilo del entrenador del Mallorca, los puntos clave indican que Oltra apuesta por un 4-2-3-1, por una defensa adelantada que presione muy arriba y por lo tanto que asuma riesgos. Este tratado de intenciones es un sello de la 'marca Oltra' y en el Mallorca no será una excepción. El entrenador a día de hoy, con el equipo del que dispone en estos momentos, podría jugar con Aouate en la portería -aunque Miño ha firmado muy buenas actuaciones cuando ha jugado- y una línea defensiva formada por Ximo, Nunes, Bigas y Kevin. Queda por conocer si se puede desatascar la opción de Hutton porque en caso de que el jugador del Aston Vila pudiera recalar de nuevo en el Mallorca, todo indica que se armaría con el puesto de titular.

Márquez y Thomas son en estos momentos los mediocentros, sin olvidar a Martí, que también tendrá mucho protagonismo durante el presente curso. Siempre termina jugando. Oltra apuesta por tres medias puntas que podrían ser ante el Sabadell, Nsue, Alfaro y Aki. El japonés ha firmado también un gran stage y está respondiendo muy bien al trabajo siendo una de las revelaciones de la pretemporada.

Delante está la opción de Víctor, que apunta a titular, aunque su lesión le ha dado mucho protagonismo a Gerard Moreno en este stage.

A partir de ahí hay que ir atando cabos sueltos y queda por concretar si el club podrá fichar a nuevos futbolistas para el centro del campo, si Márquez y Alfaro seguirán, si lo hará también Pereira, si Víctor definitivamente también continuará en el Mallorca y sobre todo si el estilo que quiere implantar José Luis Oltra será el que lleve al Mallorca a situarse en los lugares de privilegio de Segunda División. Toque, precisión, presión y recursos para llegar a la meta rival caracterizan el esquema de Oltra. Un esquema con un claro objetivo: ascender a Primera División.