El entrenador del Mallorca, Joaquín Caparrós, da instrucciones a sus jugadores. El utrerano parece tener más o menos claro cuál será la base del equipo la temporada que viene. | Redacción Digital

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STANDARD DE LIEJA: Moris, Goreux, Ciman, Van Damme, Gershon, Vainqueur, Ajdarevic, González, Mujangi Bia, Seijas y Ezekiel.

También jugaron: Kawashima, Cisse, Pocognoli, Batshuayi, Mpoku, Bulot, Buzaglo, Buyens y Ogunjimi.

MALLORCA: Aouate, Nsue, Ramis, Nunes, Antonio López, Pina, Javi Márquez, Alfaro, Pereira, Víctor y Arizmendi.

También jugaron: Hemed, Martí, Abdón Prats y Bigas.

Árbitro: Van Esch. Amonestó a Pina y Ramis por parte del Mallorca y a Vainqueur, Ajdarevic y Mujangi Bia por parte del Standard de Lieja.

Gol:

1-0, minuto 45, Nacho González.

Joaquín Caparrós mostró ayer por primera vez las cartas sobre las que girará la última actualización del Mallorca. En el estadio Justin Peeters de Wavre y ante un Standard de Lieja mucho más rodado y cohesionado, el entrenador utrerano le quitó el precinto a su equipo y compuso el primer once inicial del verano, en el que dejó una buena muestra de cuál va a ser la base del conjunto bermellón durante la temporada para la que ahora se prepara.

Alineó Caparrós a un cuadro que podría ser perfectamente el que comparezca en agosto ante el Espanyol para dar por inaugurada la Liga. Se estrenaban de inicio los tres jugadores de campo que se han sumado al proyecto en las últimas semanas -Antonio López como lateral zurdo, Javi Márquez como socio de Pina en la sala de máquinas y Arizmendi al costado de Víctor en la vanguardia-, instalaba a Emilio Nsue en el lateral derecho y ocupaba los carriles del centro del campo con Alfaro y Pereira, que a su vez irán alternándose a medida que la carretera se empine. El resto, lo previsto en el guión.

Con esas armas y algún que condicionante sin demasiada importancia (Álvaro Giménez había sido descartado por precaución tras recibir un golpe en el pie durante uno de los entrenamientos de Oosterbeek), el Mallorca dispuesto a tomarse el pulso, aunque el fue el Standard quien aprovechó la carga de combustible que transportaba en el depósito para marcar la pauta y dominar sin problemas el partido.

El encuentro, pese a todo, se calentó por momento y una serie de jugadas confusas desembocaron en un pequeño enfrentamiento entre los futbolistas de ambos equipos en el que Ramis asumió parte del protagonismo. Hasta que, justo antes de que descendiera el telón del primer tiempo, el exvalencianista Nacho González abrió la puerta rojilla y anotó el tanto que acabaría desequilibrando la balanza del primer bolo del stage veraniego.

Durante el segundo tiempo el choque bajó aún más en intensidad y los focos se centraron sobre Marvin Ogunjimi. El belga, por el que el Mallorca pagó 2,7 millones de euros hace menos de un año, dispuso de alguna ocasión pero no llegó a herir al cuadro rojillo.