Mucho más que un partido

La gran baza de los pupilos de Antonio Vadillo pasa por jugar en casa donde no han perdido ni un partido en todo el año. Son Moix se ha convertido en un fortín del que apenas se han escapado dos puntos de los once partidos ligueros que se han jugado en Palma, además de las tres victorias en Europa. El balance en casa es muy positivo pero es un partido a vida o muerte y sin margen de error, lo que obliga al equipo balear a salir a dar él máximo y no confiarse ante una de las grandes sensaciones de la temporada. De hecho, el conjunto gallego consiguió sacar un empate del enfrentamiento liguero disputado en Galicia (2-2), ha ganado cinco de sus últimos seis partidos y viene de golear al Viña Albali Valdepeñas en la última jornada de Liga (8-2).

Buen recuerdo

El Mallorca Palma Futsal está ante una gran oportunidad en una competición que se le ha resistido en los últimos años y de la que guarda un gran recuerdo desde la final que jugó en Sevilla en 2017. Está a una victoria de clasificarse para una semifinal y conseguir un pleno histórico ya que es el único club español que tiene la opción de jugar las fases finales de todas las competiciones. Con el cambio de formato, las semifinales y la final de la Copa del Rey se juegan de forma consecutiva en abril en una sede única. Este año será el 1 y 2 de abril en Antequera.

Antonio Vadillo no podrá contar con Dani Saldise, que ya no pudo jugar el fin de semana por unas molestias, por lo que será baja para el partido junto a Jesús Gordillo. El conjunto gallego ascendió esta temporada a Primera División y en sus filas cuenta con hasta seis jugadores pertenecientes al Mallorca Palma Futsal que están cedidos al Noia, además del entrenador Marlon Velasco, un histórico del club mallorquín desde los tiempos del Fisiomedia.