Enric Mas, durante la presentación del Movistar Team 2024, en Madrid. | F.Fernández

TW
12

Con ánimos renovados y la autoexigencia de estar delante tras un año complicado, Enric Mas Nicolau (Artà, 1995) afronta 2024 con totales galones de jefe de filas en el Tour y Nairo Quintana como compañero en la pelea por la conquista de La Vuelta. Estar de nuevo en el podio, pero especialmente ser competitivo y estar en la puja por ganar una 'grande' son algunos de los retos que afronta el ciclista, que ha estrenado recientemente paternidad camino de los 29 años -cumple años el 7 de enero- y encara el próximo curso con un nuevo enfoque en la gestión de las carreras. Mas atendió a Última Hora en la sede de Telefónica en Madrid durante la puesta de largo del Movistar Team.

Con la perspectiva que da el tiempo, en 2023 ha vivido de todo. Desde un buen inicio, pasando por la caída del Tour y una Vuelta exigente. ¿Qué conclusiones saca de este año?
— Echando la vista atrás, es verdad que sólo veo del Tour hacia adelante, hasta final de temporada. Y las sensaciones no han sido casi ningún día buenas, a excepción de algún día en La Vuelta. Pero espero poder cambiar todo esto en 2024. Es verdad que empecé bien, en Andalucía, País Vasco... Han sido detalles pequeños, algunos que puedo controlar o gestionar, pero otros que no. Y esos son los que me han separado de la victoria o el podio. La próxima temporada tendré que hacer una gestión diferente de las carreras y no tener mala suerte, que es un factor clave y a mí me ha pasado factura.

¿Cómo de duro fue el golpe moral de verse fuera en aquella primera etapa de Bilbao?
— Duele. Mucho... El golpe, al final es una lesión, pero hizo más daño a nivel psicológico. Era un Tour especial, saliendo de Bilbao, con toda la gente ahí... Para mí era especial y tenía ganas de hacer algo importante, de demostrarme y demostrar a la gente que puedo pelear con los mejores. Pero supe salir, aunque costó. Por eso, tengo más ganas de volver al Tour. De sacarme esa espina y disfrutar de un Enric y un Movistar que estén delante. Creo que, con buenas piernas y en forma, puedo ganarle a cualquiera.

Una vez más, la confianza en su rendimiento de Eusebio Unzué ha quedado patente en los momentos más complicados...
— La verdad es que sólo puedo tener palabras de agradecimiento para el equipo en general, y para Eusebio en particular. Contar siempre con su confianza y del resto me ha ayudado a salir adelante cuanto las cosas pintaban peor, y a ganar en seguridad en mí mismo y en mis posibilidades. Esta es una de las cosas que hace grande al Movistar, esa sensación de unidad y de familia.

El ciclista mallorquín Enric Mas, durante la entrevista. Foto: F.Fernández

Tour de Francia y Vuelta a España serán de nuevo sus principales objetivos. ¿Le vale cualquier resultado que no sea un podio o una victoria ahora mismo?
— No, no. Me exijo volver al podio o estar en lo más alto. No me puedo ir de 2024 sin haber hecho una temporada buena, porque ya llevo demasiadas carreras en las que no puedo demostrar quien es Enric, y ya tengo ganas de competir y vaciarme. Espero que veamos la vida de otra manera este año, que no tengamos mala suerte. Hubo unos días en los que estábamos barajando un poco qué competición hacíamos, pero llegado el momento, el jefe -Eusebio Unzué- me dijo que fuéramos a por el Tour, que ahí tenemos una espina grande clavada y nos la tenemos que sacar.

¿Le motiva un recorrido tan duro como el de La Vuelta del próximo año?
— Me gusta mucho, la verdad. Es muy exigente, se puede decir que es un examen diario que hay que aprobar con nota. De principio a fin hay que cumplir si quieres estar delante y no verte descolgado.

¿Cuál será su calendario base para la próxima campaña?
— En principio, el plan es hacer Tirreno, Catalunya, Romandía y Tour, en un primer bloque, y después están los Juegos Olímpicos. Es verdad que el recorrido no es mucho para corredores de mis características, pero bueno, después están La Vuelta y el Mundial, que es muy duro este año y se puede adaptar a mis características y creo que son objetivos que debo plantearme seriamente.

Enric Mas, atendiendo al redactor de este diario. Foto: J. Sellés

¿Y los Juegos de París?
— Si hago un buen Tour, a lo mejor sí que me animo, pero si después hay que preparar La Vuelta, que realmente es mi punto fuerte de las tres semanas, tendremos que ver un poco cómo se desarrolla la temporada y lo valoraremos. Hay ciclistas españoles que responden muy bien, que son muy buenos y que también quieren ir. Pero a todo deportista la ilusiona participar, aunque queda mucho camino por delante.

Al igual que han hecho otros como Pogacar o Roglic, ¿se plantea el Giro como alternativa en algún momento? ¿O apostar por carreras de una semana potentes tipo Catalunya o Itzulia?
— Las carreras de una semana, porque yo siempre he sido un corredor al que le han ido bien las pruebas de tres semanas. Es verdad que tienen importancia, pero me siento mejor en pruebas de fondo, largas. ¿El Giro? Me gustaría hacerlo algún día, pero más adelante. Ahora, tengo otros objetivos más importantes y que priorizo. Y pasan por estar delante en Tour y Vuelta. Especialmente en Francia, pues en La Vuelta ya he sido podio y mi reto es ganarla.

Enric Mas, relajado durante la presentación del Movistar Team. Foto: SprintCycling

¿Cree que no se pone en valor estar delante en un momento en el que hay un nivel excepcional en el pelotón, que se prioriza demasiado el ganar o no?
— Sinceramente, estoy cansado de estar delante y no ganar. Así de claro. Eso es lo que quiero cambiar, y estar delante y ganar. Tengo 28 años, para 29, me quedan años de carrera todavía, pero la vida deportiva de un ciclista no es eterna. No sé cuántos años me quedan a mi mejor nivel y tengo que aprovechar las oportunidades y los momentos, y cambiar radicalmente la gestión de las carreras, por mi parte.

¿Podemos soñar con ver a un mallorquín ganando una prueba de tres semanas?
— Espero que sí. Y este año, con la salida y la meta de la última etapa de La Vuelta en 'casa' (la crono final en Madrid sale de la nueva sede de Telefónica para acabar en su histórico edificio del centro), tengo una motivación añadida, más si cabe. Y, como dice el jefe, sería precioso poder vestir el maillot rojo en un marco tan emblemático y en el año del centenario.

Diez caras nuevas, pero por encima de todo, el regreso de Nairo Quintana. ¿Cómo valora esta incorporación de primer nivel?
— Sin duda alguna, es súper positivo e importante hacer este gran cambio, ya que creo que el nivel medio del equipo ha subido mucho, más todavía con la llegada de Nairo, que se hizo grande aquí y logró grandes resultados para Movistar. Tuvo un paréntesis de cuatro años en los que no estuvo en la casa, pero ahora nos va a aportar mucho. Es una figura importante para el grupo y para nuestro deporte, y todavía tiene cosas que decir, seguro. Viene para sumar.

¿Qué opinión le merece la aparición del Illes Balears Arabay, un equipo profesional de su tierra?
— Estoy contento por ellos. Empezó Toni (Vallcaneras) y ahora se ha sumado Lluís (Mas), con más gente detrás. Cuando les veo me informo de cómo les va y pienso que es positivo que haya estas iniciativas. Tener un equipo profesional en Mallorca y Baleares posee un enorme valor y gracias a su empuje, se podrá volver al pelotón y la afición disfrutará y seguirá a los corredores. Somos una tierra de ciclismo y seguro que les irá bien.

De cara al futuro, ¿tenemos motivos para la esperanza con Ayuso, Carlos Rodríguez y compañía?
— Han demostrado ser muy competitivos siendo todavía bastante jóvenes y tienen todavía margen de mejora. Siempre que aparezcan nuevas caras y gente competitiva será bueno para el ciclismo español, especialmente para no quedarse atrás en un momento en el que el nivel dentro del pelotón es de los mejores de la historia.

¿Le ha sorprendido que Mallorca quiera la salida de La Vuelta para 2026?
— Te he leído. Y ojalá, oye. Es verdad que es complicado por muchos factores y no es fácil montar la salida de una vuelta grande, y más en Mallorca por la logística y en verano. Pero como mallorquín, lo firmaría ahora mismo. Poder comenzar La Vuelta ante mi gente sería toda una experiencia, algo bonito para mí y para todos los aficionados de la Isla. La última vez que pasó yo era muy pequeño y sería un sueño más cumplido.

Ahora que ha sido padre, ¿se ve con otro ciclista en casa?
— Sinceramente, no (risas). Primero le intentaremos educar de la mejor manera posible. Después, él ya decidirá su futuro, qué quiere hacer y veremos... si le gustan las bicicletas, pues adelante. Y sino, le apoyaremos en todo lo que decida o quiera. La verdad es que está siendo toda una experiencia. Y muy bonita.