Los jugadores y el equipo técnico de el Palma Futsal.

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Ciutat aguarda un reto monumental. La batalla por conquistar cima del planeta fútbol sala asoma en el horizonte y el Palma Futsal toma posiciones para una ofensiva histórica. Jaén es la primera amenaza del grupo isleño en una lucha por la gloria que comenzará a librarse el viernes a las 20:30 en el Palau d’Esports de Son Moix.

La campaña de los hombres de Juanito ha alcanzado todos sus objetivos. Los isleños se han procurado un tiempo de vino y rosas durante una fase regular forjada a base de victorias, pero llega el momento de adentrarse en los playoffs, un territorio por conquistar del que solo vale volver con el escudo o sobre él.

El primer asalto cobra una trascendencia decisiva en una serie de duelos que se resolverá al mejor de tres enfrentamientos. El Palma Futsal quiere asestar un golpe de autoridad y tomar la delantera en su fortaleza de Son Moix. Los isleños reclaman el respaldo de su afición conscientes de que su siguiente destino será lo más parecido al infierno. Jaén, que luce en su historial su flamante título de Copa, se erige en un adversario temible por su capacidad competitiva y, en especial, en su feudo, donde se resolverá la contienda en un ambiente al rojo vivo -el segundo y el tercer partido de la serie, en caso de ser necesario, se disputará en tierras andaluzas.

Es la segunda vez que los isleños tienen la oportunidad de codearse con los ocho mejores equipos de la mejor liga del planeta -el Fisiomedia Manacor jugó los playoffs en 2011- y quieren disfrutar del momento con una victoria que les conceda una buena porción del pase al penúltimo escalón por el trono.