Shaun Green posa en el Palau d'Esports de Inca. | M. À. Cañellas

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El asalto a la cancha del Clavijo ha disparado más si cabe las expectativas de un Bàsquet Mallorca que tiene ante sí la opción de disputar el primer título en juego en su retorno forzoso a la categoría de bronce.

El grupo de Xavi Sastre llega al ecuador de la temporada regular inmerso en un sensacional momento de juego y anímico, y ante el River Andorra, y con el factor pista a su favor (miércoles 29, 21 horas, Palau d'Esports), se jugará el estar en la final de la Copa Adecco Plata, que enfrentará a los dos mejores conjuntos de la competición al concluir este tramo.

Con tres triunfos de calidad (ADT Tarragona, Tíjola y Clavijo) a sus espaldas (10-3), los naranjas dependen de sí mismos y podrían forzar un triple empate en cabeza. Si ganan al Andorra (10-3), tendrán el billete garantizado y el Clavijo (11-2) se plantea como el adversario, y de nuevo todo señala a las tierras riojanas como escenario del pulso. Si los del Principado se hace fuertes en el Palau y detienen al equipo más en forma de la LEB Plata, serán ellos quienes luchen por el cetro. Un reto que ilusiona cada vez más al vestuario que encabeza Sastre, quien sabe que «ganar dos veces en tan poco tiempo al Clavijo no sería nada fácil», aunque no esconde que «sería un buen premio para todos, incluída la afición».

La llegada de Green, la recuperación de la normalidad en el día a día, en especial con el pago de los salarios pendientes, y la calidad de un plantel cuyos recursos se han equilibrado al máximo, consolida a los isleños como aspirantes a todo, haciendo valer su dilatado historial en LEB Oro como referente.
La cita sería el 29 de enero de 2011, con Logroño como más que probable escenario de un acontecimiento que podría dar al Mallorca su primer título oficial.