El base del Regal F.C.Barcelona Ricky Rubio (d) y el base estadounidense con pasaporte montenegrino del Unicaja, Omar Cook, observan el balón durante el tercer partido de semifinales de la Liga ACB. | Efe

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UNICAJA 72

REGAL FC BARCELONA 82

UNICAJA: Cook (5), Neal (18), Blanco (6), Printezis (7) y Archibald (6) -- equipo inicial--, Rodríguez (14), Dowdell (4), Welsch (-), Rubio (-), Freeland (10)y Jiménez (2).

REGAL FC BARCELONA: Rubio (5), Navarro (14), Mickeal (16), Lorbek(16), N'dong (2) --cinco inicial--; Lakovic (-), Basile (20), Grimau (-), Morris (1), Sada (2) Trias y Vázquez (6).

PARCIALES: 21-20, 19-15, 19-22, 13-25.

ÀRBITROS: Martín B. Bultó y Conde. Sin eliminados.

PABELLÓN: Martín Carpena. 10.000 espectadores.

El Barcelona cumplió con los pronósticos y se convirtió en el primer finalista del 'play-off' de la ACB aunque, para ello, tuvo que tuvo que ponerse el traje de faena a la hora de superar (72-82), en el tercer partido de la serie a un Unicaja que no perdió la fe hasta los últimos compases en sus posibilidades de victoria.

Que el Unicaja iba plantar batalla se vio claro desde el inicio. Porque el primer cuarto fue una auténtica lucha sin cuartel, en la que el Barcelona, en un constante toma y daca, tan sólo pudo endosar a su rival un momentáneo parcial de 0-5, rápidamente enjugado por los malagueños.

Cada triple, cada tapón, cada movimiento táctico era contestado de manera implacable por un Unicaja que, bajo la batuta de Printezis terminó el primer cuarto uno arriba (21-20). Los fallos en la pintura del Barcelona eran compensados por el acierto culé en el rebote. Pero, poco a poco, los locales comenzaron a mantener una ventaja corta pero suficiente para obligar al Barça a forzar la máquina.

Así, mediado el segundo cuarto, los verdes andaban 32-25, liderados ahora por un Berni Rodríguez implacable en los tiros de tres. Con el Barcelona echando de menos la aportación de Navarro, el Unicaja todavía se marchó aún más arriba (35-27). Y aunque la 'Bomba' reapareció por momentos, ahí estaba siempre Berni ganar el duelo de aleros, bien secundado por Neal que, con un triple, elevó la renta de su equipo a 9 puntos ((40-31).

Pero otro tiro de 3 y un lanzamiento libre de Basile dejó el luminoso en un apretado 40-35 al descanso. La clave de este resultado estribaba en el buen balance defensivo cajista, que permitía a los de Aíto García Reneses evitar los habituales contraataques del Barcelona, sin olvidar la hegemonía andaluza en los triples.

Pero en el tercer cuarto los repetidos fallos del Unicaja en los rebotes defensivos permitieron al Barcelona recortar distancias hasta empatar (50-50), con un parcial de 1-7 primero, y rebasar al Unicaja con un triple y una canasta de 2 de Basile (52-55). Pero el Unicaja no se rendía. Así, Neal empataba a renglón seguido y sendos tiros libres de Freeland hacía que el último cuarto comenzara con los costasoleños mandando en el luminoso por 59-57.

Ahora el Unicaja unió líneas, pero para eso estaba Basile con sus triples, siempre inapelables. La emoción no bajaba un ápice, porque entonces se destapaba un Neal inconmensurable, que enjugaba cada lanzamiento exterior de Basile, en tremendo mano a mano entre los dos máximos anotadores del partido.

Sin embargo, la ansiedad de los cajistas acabó por pasarles facturas en el momento crítico, y eso, ante un coloso como el Barcelona, siempre se paga. Porque en los dos minutos finales los errores del Unicaja y el acierto por fuera de Lorbek, con sendos triples decisivos, hundieron definitivamente la heroica resistencia de la escuadra malacitana que no pudo completar el milagro tras un esfuerzo sencillamente encomiable.