Gregorio Manzano golpea el balón durante un entrenamiento del Mallorca. Foto: MONSERRAT

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Gregorio Manzano no se fía. Ni del mal momento del Barcelona, ni del relevo en el banquillo azulgrana, ni de la pañolada que inundará mañana las gradas del Camp Nou. El técnico jienense está convencido de que la crisis que ahoga estos días al conjunto culé puede empinar el camino del Mallorca hacia las competiciones europeas y ha preparado a los suyos para una de las funciones más espinosas de este ajetreado epílogo de campaña. «No estoy nada confiado porque si ellos aprietan... Soy precavido y voy con la mosca detrás de la oreja. Nos podemos encontrar a un Barça muy fuerte y poderoso», avisa.

El ejemplo que más preocupa ahora al entrenador rojillo es de hace un par de semanas. El Valencia, aparentemente rehabilitado, irrumpió en el cuartel barcelonista dispuesto a concretar su lavado de imagen con una victoria que le sacara del atolladero y volvió a casa con seis goles encima (6-0). Ahora, teniendo en cuenta lo vivido el pasado miércoles en el Bernabéu, Manzano espera una bienvenida envenenada: «Su salida será la misma que ante el Valencia, ir a por todas desde el principio. Nosotros vamos dispuestos a seguir la buena línea, aunque habrá que trabajar mucho y bien. Parece que, a priori, está todo muy fácil. Las aguas andan un poco turbias en Barcelona y nosotros atravesamos un buen momento. Yo no le veo así. Pienso que va a ser un encuentro muy complicado porque cualquier equipo grande que se despide ante su público no puede hacerlo con los brazos caídos. De hecho, en el Camp Nou no ha ganado mucha gente esta temporada».

En esa misma dirección, Manzano apunta que le ha recomendado a la plantilla isleña que se aísle de cualquier factor ajeno al encuentro y que siga las coordenadas de siempre: «Supongo que después de lo que pasó el otro día en Madrid, el público no estará para bailar sevillanas. Pero tenemos que vivir al margen de eso porque no nos van a regalar el partido. Querrán demostrar a su gente que son profesionales e intentarán ganar», insite el de Bailén. «Han tocado fondo a nivel deportivo y tendrán que reencontrar sus señas de identidad ante nosotros. En un club así, no ganar títulos es un fracaso».

Manzano volvió a recordar también que la confección de la próxima plantilla está supeditada a que se consiga un billete para la UEFA. «Si llegamos a Europa, la cosa cambia. Por eso estamos un poco parados en ese aspecto. No es lo mismo competir a nivel doméstico que hacerlo además en Europa, ya que nos exigiría un esfuerzo añadido. De todas formas, eso se debatirá al final», comenta. De paso, el técnico aclaró que su futuro sigue ligado al Mallorca: «No tengo ninguna oferta ni nadie ha llamado a mi puerta. No sé nada de los comentarios y estoy en la misma situación que antes. Cuando suceda, si es que sucede, ya lo valoraré. Ahora sólo quiero sumar los tres puntos en el Camp Nou y llegar a la meta».

El responsable del plantel mallorquinista, que argumentó la ausencia del equipo en la lista de inscritos para la próxima Copa Intertoto, -«creímos oportuno hacer la pretemporada como lo hacemos normalmente; había más incovenientes que ventajas»- defendió la convocatoria de Moyà como tercer portero de la selección en la Eurocopa de Austria y Suiza: «Ha hecho un buen campeonato, pero en España hay muy buenos porteros y aparte de Casillas y Reina hay otro grupo de gran nivel entre los que está Miquel Àngel. Depende del seleccionador y de los criterios que aplique. Yo, lógicamente, apostaría por él».