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Fernando Fernández La Semana no puede empezar mejor para los anfitriones. Las medallas de plata conseguidas por los mallorquines Miquel Joan Adrover (Másters 30) y Toni Vives (Másters 40) en la XIIIª Copa de Europa les permiten (especialmente al primero) meterse de lleno en la puja por el gran premio y advierten que un nuevo campeón continental está al caer tras varios años de sequía.

Pese a todo, fueron los Másters 50 y 55 los que abrieron fuego con cinco giros sobre el circuito de 11'5 kilómetros (Platja de Palma-s'Aranjassa-Ca'n Pastilla). Pronto se distanciaron del gran grupo los que iban a ser animadorea de la carrera. Los incombustibles Joop Ribbers y Wladimir Gottfried y Hans Post abrieron hueco, llegando a alcanzar un minuto de margen respecto al pelotón perseguidor, que se puso las pilas a medida que el tiempo pasaba. Ya en el último giro, el aumento de la velocidad no sirvió para que el trío se jugara las medallas. Ribbers fue más veloz y relegó a la plata a Gottfried, mientras que Post completaba el cajón. En lo que a Másters 50 se refiere, José Luis Blanco dio la primera alegría al equipo español al superar en la última pedalada al noruego Kristiansen Asbjorn. Tercero acabó el ruso Sergey Fadeev, mientras que los corredores locales quedaron relegados a la parte intermedia de la clasificación en una prueba marcada por el elevado nivel de los participantes foráneos.

La carrera estelar llegaba cuando más apretaba el sol y con la mayor participación de la presente entrega de una Copa de Europa en la que todos son rivales de todos a la caza del maillot azul estrellado. Esta vez eran siete giros en los que la vigilancia fue constante entre los Másters 30, 35 y Ciclodeportistas. El más listo fue David Romero, que lanzó la ofensiva en el momento adecuado, aprovechando la tensión de los últimos metros, y celebró a lo grande su entrada en meta en solitario. La que le valía la medalla de oro en Másters 35 y el triunfo parcial en la segunda carrera de la Copa de Europa. Los rusos Alexander Torkachenko e Igor Arkhipov le acomopañaron en el podio de la Platja de Palma en su clase, mientras que más reñida estuvo la cosa en Másters 30, ya que Francisco Robles tuvo que emplearse a fondo para evitar la victoria de un Miquel Joan Adrover que se conformó con una plata que sabe a victoria y que le posiciona de cara a luchar por la victoria final.