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Fernando Fernández
El Palma Aqua Mágica inicia el camino para convertirse antes de que finalice este año en Sociedad Anónima Deportiva (SAD). La asamblea extraordinaria de socios del Club Bàsquet Alcúdia, entidad matriz de su primer equipo asentado en Ciutat, ha sido convocada para este sábado 30 de septiembre en la sede social de la entidad (calle Hostal, 13, Alcúdia) a las 11 y las 12 horas, en primera y segunda convocatoria, y con un único punto en el orden del día. Y no es otro que la transformación del club en Sociedad Anónima Deportiva, al que seguirán los pertinentes ruegos y preguntas al respecto. Los dirigentes del club con franquicia LEB esperan poder sacar adelante su iniciativa con el apoyo de su masa social, con lo que la entidad presidida por Miquel Ramis se convertiría en la tercera de todo Balears con el rango de SAD, tras el Real Mallorca y el Menorca Bàsquet, cuyas conversiones datan de 1992 y 2006, respectivamente.

Con la aprobación de los socios, el Palma Aqua Mágica va camino de ser el décimo equipo de la LEB con credenciales de SAD, cumpliendo con uno de los preceptos que solicita la Liga ACB para su inscripción en la competición, aunque da un margen de una temporada para poder completar el proceso, que para el Palma Aqua Mágica espera poder finiquitarse antes de que acabe 2006. La asamblea del sábado es un simple formulismo para cumplir otro de los puntos básicos del proyecto del Aqua Mágica, que deberá fijar un capital social que, tal y como adelantó Ultima Hora el pasado 12 de enero, rodaría los 1,5 millones de euros. La venta pública y posterior adjudicación y cierre del paquete accionarial servirán para rubricar el nacimiento del Club Bàsquet Alcúdia SAD, uno de los objetivos que Ramis y su directiva se fijó fuera de la cancha para la temporada que acaba de arrancar para el Palma Aqua Mágica, que logró una victoria en Tenerife en su puesta de largo (76-88).

En el seno del club no existe preocupación a la hora de poder cubrir el capital social que se apruebe y que se podría dar a conocer en el transcurso de la asamblea del sábado, una cita que parece un trámite, pero que posee una enorme trascendencia para el futuro del club. En lo deportivo, Robert Battle evoluciona favorablemente de su lesión en el ligamento peróneo del tobillo izquierdo y se espera que hoy pueda regresar al trabajo con el resto de sus compañeros. «La evolución es buena, pero es pronto para hacer un diagnóstico definitivo», explicaba Tomeu Munar, responsable de los servicios médicos del primer equipo palmesano, quien recomendó «no forzar de cara al domingo», aunque recordó que «la decisión final la tendrá el entrenador en función de cómo esté el jugador el fin de semana».