El entrenador del Real Mallorca, Gregorio Manzano, confirmó ayer que el club no tiene pensado contratar a otro portero tras la lesión sufrida por Miquel Àngel Moyà y recordó que las gestiones se centran ahora en la incorporación de un lateral derecho y un centrocampista organizador que permitan abrochar la plantilla. El jienense, que volvió a subrayar que lo que más le interesa ahora es caminar paso a paso, no quiere saber nada de las aspiraciones europeas de alguno de sus hombres y mantiene la calma: «Hay que avanzar poco a poco y el objetivo es acortar el camino hacia la permanencia. Después ya miraremos hacia arriba».
El preparador andaluz catalogó de «contratiempo importante» la repentina baja de Moyà, pero está convencido de que en las categorías inferiores hay elementos de sobra para cubrir su hueco, al menos durante la pretemporada: «De momento no vamos a fichar a nadie. A Kössen viajarán dos chavales (Gerardo y Juanjo) y serán los tres únicos porteros con los que trabajaremos». El de Bailén ofreció su visión particular sobre la desafortunada acción que provocó la baja debinissalemer: «Fue una desgracia inesperada y una jugada muy tonta. Se dejó caer y al levantarse se le quedó el pie atrás y ya notó un chasquido que después se confirmó que era una rotura de menisco. Nadie lo esperaba y él tenía unas ganas enormes de competir desde cero con Prats. Además, perderse una pretemporada conlleva una desventaja importante».
A la hora de valorar lo que puede crecer el grupo en las próximas semanas, Manzano sabe muy bien cuales son sus necesidades: «Estamos en la misma línea que a principios de semana, pero todavía nos falta un lateral derecho y un medio organizador. Esperamos incorporarlos en los próximos días». Manzano añadió que «si se da el caso de que algún jugador salga, habría que traer a alguien más de inmediato, pero a mi me gustaría tener unos veinte jugadores de campo». El entrenador del Mallorca sometió a análisis al último refuerzo, Javier Dorado, del que espera muchas cosas a lo largo del ejercicio: «Lo que le voy a pedir es lo que se le tiene que pedir a un lateral izquierdo. Que esté bien en su puesto, que se acople cuanto antes a sus nuevos compañeros y que aporte su calidad, tanto en ataque como en defensa. Calidad tiene mucha porque estuvo en el Madrid y llegó incluso a conquistar una Champions. No me disgusta que sea tan ofensivo, pero tendrá que ajustarse a los trabajos defensivos». Según el técnico, «tiene experiencia, es competitivo y se ajusta al perfil que buscábamos». El preparador, que hoy dirigirá última sesión doble de la semana, explicó que la temperatura de los últimos días está afectando de lleno al trabajo de la plantilla: «El calor está apretando y los jugadores pierden mucho líquido y suelen gastar unos sesenta litros de agua. Eso demuestra lo mucho que están sufriendo».
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