En cuadro para recibir al Real Madrid

El Mallorca tendrá el tiempo justo para saborear una victoria balsámica. La Rosaleda ha permitido a los rojillos colocar la primera piedra de la remontada, pero en el segundo escalón le faltarán cuatro futbolistas. Y es que no sólo los citados parecen descartados por sanción, sino que también Borja Fernández se perfila como otro de los ausentes debido al compromiso alcanzado en su cesión. El centrocampista gallego llegó a la Isla en calidad de cedido por el Real Madrid y la SAD balear deberá abonar 150.000 euros si pretende alinearle ante el club que posee sus derechos.

Sin embargo, las bajas más significativas son las de Potenza, Pereyra y Tuzzio, aunque este último podría entrar en la lista de convocados si los servicios jurídicos del Mallorca recurren la segunda cartulina amarilla que le mostró Velasco Carballo en las postrimerías del encuentro. Potenza, que ayer actuó en el lateral derecho debido a la baja por sanción de David Cortés y la ausencia por lesión del argentino Pancho Maciel, vio su quinta cartulina amarilla igual que Pereyra, cuya ausencia limita el margen de maniobra de Manzano para diseñar el centro del campo. Y es que sin el argentino y presumiblemente sin Borja el jienense dispone de Farinós, Doni y Basinas, aunque el griego y el propio club deberán negociar con la federación helena para retrasar su incorporación a la selección de su país, que debe disputar un torneo internacional amistoso en Chipre.

No sólo la sala de máquinas sufrirá una metamorfosis, ya que las ausencias impedirán que Manzano disponga la misma zaga que ayer. El lateral derecho puede volver a ser propiedad de David Cortés, que es uno de los pocos supervivientes de la plantilla que conquistó la Copa del Rey en 2003. El extremeño ha cubierto el ciclo de cartulinas y todo apunta a que Manzano depositara su confianza en el ex jugador del Extremadura, que debutó precisamente en Primera de la mano del que ahora vuelve a ser su preparador.

Inicialmente Tuzzio, que con la de ayer sumó su segunda expulsión de Tuzzio con la camiseta del Real Mallorca tras ver la roja ante el Fútbol Club Barcelona en el estadio de Son Moix, se presume como baja, por lo que puede ser la oportunidad de Sergio Ballesteros. Y es que con Potenza esperando a cumplir la sanción por acumulación de cartulinas amarillas Manzano vuelve a ver reducido su margen de maniobra. El central de Burjassot es el único recambio natural que le queda al preparador rojillo, que aún tiene en la enfermería a Pancho Maciel, otro efectivo que podría ejercer de central si finalmente, tal como se espera, abandona el listado de bajas en las próximas horas.

No son las condiciones ideales para afrontar un partido que se antoja muy complicado ante un Real Madrid pletórico. Los blancos han recobrado la fe y llegarán a Son Moix tras haberse reencontrado con la Liga de Campeones. Precisamente el Arsenal, el primer equipo con el que se midió el Mallorca en su estreno en la máxima competición continental, se puede convertir en el mejor aliado de los inquilinos de Son Moix. El equipo de Wenger pondrá a prueba la mejoría experimentada por los hombres de Juan Ramón López Caro, que podrían acusar el cansancio en su visita a Palma.

Los madridistas han recuperado a Raúl y dispondrán de un nutrido ramillete de delanteros de primer nivel. La defensa que disponga Manzano se las tendrá que ver con una delantera por la que compiten Ronaldo, Baptista, Robinho, Cassano y Raúl, por lo que el técnico jienense tendrá que extremar las precauciones en las marcas ajustándose a las exigencias del guión.

Los bermellones dispondrán de más días de preparación que su rival y Manzano tendrá más sesiones para tener un mayor conocimiento del nivel en el que se encuentran cada uno de sus hombres. La cuenta atrás empieza hoy y desde hoy seguro que el técnico cruza los dedos para que no surjan más contratiempos en los próximos días.