Héctor Cúper dialoga con los jugadores en un momento del entrenamiento efectuado ayer en las instalaciones de la ciudad deportiva.Foto: MONSERRAT

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Es la primera cita seria con el presente, pero también es un guiño al pasado. El Mallorca de la nueva generación de argentinos se pone a prueba ante su hinchada en el Ciutat de Palma, un torneo cargado de nostalgia que andaba guardado en algún cajón de la historia del club. Luego de la sufrida permanencia en la categoría y de vivir en el alambre en los últimos años, los gestores del club -que también han cambiado- han decidido darle un revolcón al equipo, que presentará esta noche algo más de músculo y un poco menos de talento. Será ante el Hertha de Berlín, un rival aseado. Pero eso es lo de menos, porque lo importante será escrutar si las carreras degalgo Gutiérrez por la derecha son infinitas, si Peralta maneja la zurda con escuadra y cartabón, si Potenza es mejor que Ramis o si Borja ha decidido dar un paso al frente y enfundarse el traje de líder (Son Moix, 22.00 horas, IB3).

Nadie podrá recriminarle este año a los consejeros del Real Mallorca SAD que han sido rácanos. Decididos como estaban a cambiar todo lo que se asociaba al ciclo anterior, han tirado de catálogo y le han dado al equipo un nuevo aspecto. Hasta ocho futbolistas nuevos, desde el regreso de Toni Prats hasta la irrupción de Fernando Navarro. Ese será uno de los principales atractivos que tendrá el mallorquinismo en la puesta de largo de hoy, porque el partido ante el Hertha de Berlín apenas servirá para sacar conclusiones. Como tampoco se pueden extraer muchas de los amistosos que se han jugado hasta ahora, más bien enclenques. Acaso el encuentro ante el Blackburn, del que el Mallorca salió mal parado.

Lo cierto es que, a la espera de que llegue un delantero centro y de que el club le abra la puerta a Olembe, el Mallorca 05/06 anda bastante maduro. Tal vez no en juego, pero sí en dibujo. Cúper le ha dado prioridad a tipos como Potenza, Peralta y Borja, mientras mantiene la apuesta inicial de actuar con dos delanteros (Víctor y Luis García). Es probable que la llegada de Johnsen o Frutos deje al mallorquín en el banquillo, pero la estructura del Mallorca que viene será muy similar a la que se vio, por ejemplo, en Lleida. El fútbol, además, será muy distinto al del curso anterior. La petición del técnico argentino de contratar a un delantero centro con características de pívot, dio una idea de que las cosas van a cambiar. Juego directo, con recorrido por los dos flancos y con poco tránsito por el mediocampo.