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La mañana de once de abril, la noticia del rescate por parte de la Armada francesa de los navegantes mallorquines Hugo Ramón y Jimmy Tur en aguas de Cerdeña nos sobrecigó tanto como la experiencia que narraron a su regreso. La regata a dos «l'Odysée d'Ulysse» se convirtió en una pesadilla gracias a olas de diez metros y vientos de cincuenta nudos. Abandonaron el «Emotionsailingteam.com», un Mini de 6,5 metros que debía llevar a Hugo a hacer realidad su sueño de realizar la Mini Transat 2005, prueba que unirá La Rochelle (Francia) y Salvador de Bahía (Brasil) y para la que era el más joven inscrito en toda su historia. Su Mini era requisito indispensable para tomar la salida y de él pocas noticias se tuvieron tras perder definitivamente su localización. Hugo y Jimmy salvaron sus vidas, pero muchos años de trabajo y dedicación quedaron a la deriva. Hasta que la primera semana de mayo llegó la noticia que pocos esperaban. Un barco de pesca había hallado el «Emotionsailingteam.com» cerca de Túnez y lo había remolcado hasta el puerto de Cagliari, donde el capitán dio aviso de su hallazgo. Sin mástil y con mucha agua en su interior, fue trasladado hasta el Real Club Náutico de Palma, donde llegó un mes después. El Emotion 450 volvía a casa y con ello, Hugo reiniciaba la carrera de fondo hacia la Mini Transat.

Estuvo a punto de quedarse fuera, pero ahora prepara su embarcación para participar en la Mini Max, prueba obligatoria y previa a la Mini Transat que se inicia el dos de julio. Bajo la denominación «Mallorca ets tú», gracias al patronicio del Consell de Mallorca, que se hace cargo del proyecto, Hugo ha pisado el acelerador de cara a instalar toda la electrónica, dar retoques al caso, palos y velas... Con Guillem Quetglas como aliado, no busca un buen resultado en la Mini Max, simplemente cumplir con el expediente y no padecer todos los dolores de cabeza que ha experimentado durante la semana pasadas. Problemas con los plazos de entrega de material, que incluso llegó defectuoso, nervios... Todo por seguir con vida en esta apasionante cuenta atrás. Acabados sus exámenes académicos, Hugo Ramón afronta ahora el más complejo de todos, aunque tras su paso por la Mini Max, el Mini volverá a pasar una completa puesta a punto para seguir adelante con una ilusión que volvió a cobrar forma cuando Hugo lo daba todo por perdido.