Fernando Fernández12/12/04 0:00
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Sin apenas tiempo para haber digerido la proeza europea, el Son Amar Palma se reencuentra con la competición doméstica, y lo hace con la intención de saldar una cuenta pendiente con uno de los pesos pesados de la Superliga. El grupo de Bogoevski puede poner la puntilla a la crisis de un Numancia que visita Son Moix (12 horas) en un momento complicado, pero con el sólido aval de sus enfrentamientos directos con los mallorquines durante la pasada temporada.

El Son Amar pasó por encima del Lokomotiv de Ekaterinburgo (0-3) en un encuentro que sirvió para rubricar el excelente momento de forma del líder de la Superliga, y de paso dar una zancada hacia los cuartos de final de la Copa CEV. Con lograr más de cincuenta y siete puntos en el encuentro de vuelta, los baleares tendrán sellado su pasaporte, aunque primero deberán poner tierra de por medio respecto a un Numancia herido de muerte tras su derrota del pasado fin de semana, en casa y frente al Arona Playa Las Américas. El vigente campeón de Copa no tuvo piedad de los sorianos (0-3), que acumulan en su casillero tres derrotas que escuecen. Por ello, la victoria en Son Moix supondría una elevada dosis de moral para el Numancia, pese a que el Son Amar siempre esgrime su pabellón como arma, aunque el rival de turno no entiende de factores externos al juego y tiene las ideas muy claras.

Marcelo Méndez
El duro viaje de regreso desde la capital de los Urales puede ser el principal obstáculo que deban superar los pupilos de Bogoevski, que espera poder contar en el banquillo con la presencia de su nuevo ayudante. Marcelo Méndez podría estrenarse bajo la disciplina del Son Amar. El técnico aterriza con el papel de segundo asumido y una larga experiencia en equipos de entidad, caso del River Plate, al que ha estado vinculado en los últimos tiempos.

La ajustada victoria del Unicaja Almería frente al J'Hayber Elche no permite, en caso de victoria, dejar en solitario al Son Amar al frente de la clasificación, aunque si los planes no sufren cambios radicales, la escuadra de Ciutat seguirá al frente, pero igualada a victorias con los actuales campeones de la Superliga.

La ausencia de problemas físicos es la mejor noticia para un Son Amar cuya enfermería no se ha visto desbordada en los que llevamos de temporada, aunque la acumulación de partidos, más teniendo en cuenta la cita con el Lokomotiv del miércoles, podría llegar a pasar factura con el paso de las semanas. La profundidad del banquillo de Vladimir Bogoevski ayuda a que las rotaciones ofrezcan mayor solvencia, pero ante el Numancia se debe recuperar, o al menos mantener, la mejor dinámica del Son Amar, cuya fortaleza ha quedado demostrada en las últimas jornadas, hasta llevarles a lo más alto de la clasificación, con un juego que convence y permite a Damià Seguí mantener una alta moral que apunta hacia los títulos en disputa.