«No soy un crack, vengo a sumar como uno más»

Cedido por el Valencia hasta final de la presente temporada, el Mallorca se ha reservado una opción de compra por 3 millones de euros para quedarse en propiedad a este fino centrocampista al que Claudio Ranieri le abrió la puerta de salida.

-¿Qué esperaba del club y qué se ha encontrado?
-Me han sorprendido gratamente las instalaciones. No hay muchos equipos en España que puedan presumir de una Ciudad Deportiva como la del Mallorca. La organización del club también es notable. Deportivamente, hay jugadores con los que coincidí en el Villarreal y al resto los conozco por haberme enfrentado a ellos. Creo que hay una plantilla interesante.

-La presencia de Farinós y Ballesteros en el vestuario le habrá servido para integrarse con mayor rapidez.
-Siempre es mejor conocer a alguien, aunque el ambiente en la caseta es muy bueno y todos han acogido a los nuevos bastante bien.

-Por nombre y por procedencia está considerado una de las estrellas del nuevo proyecto, uno de los jugadores que deben marcar la diferencia.
-La palabra estrella suena un poco fuerte. Vengo a intentar sumar al grupo como uno más. Ojalá que pueda aportar todas mis cualidades en favor del equipo. Mi cesión al Mallorca no ha sido un paso atrás. Estaba claro que en el Valencia yo no contaba para nada, pero he elegido venir al Mallorca porque estoy convencido de que aquí estaré muy a gusto.

-¿Afronta esta temporada como una oportunidad para regresar a Valencia con más confianza o con intenciones de quedarse en el club?
-El Mallorca es el que tiene la sarten por el mango porque se reservó una opción de compra. Mis intenciones pasan por realizar una buena temporada, marcar 7 o 8 goles, y después ya veremos. No me gusta hacer planes a largo plazo.

-Su aterrizaje en la isla ha coincidido con la marcha de Samuel Etoo, el mejor jugador en la historia del club. ¿En qué medida afectará al rendimiento del equipo?
-No coincidí con Etoo en el Mallorca, pero es indudable su calidad. Es un jugador que te garantiza bastantes goles y es difícil encontrar un sustituto. Habrá que suplir su baja con la suma del colectivo, pero puede asegurar que en el vestuario no se habla de Etoo. No existe preocupación en este sentido.

-¿Qué sucedió realmente en el Valencia para que de la noche a la mañana cambie su condición de jugador indiscutible a transferible?
-Pues no lo sé. Mi salida fue un poco extraña. No entiendo cómo un equipo que ha sido campeón de Liga cambie tantos jugadores. En mi caso personal, es extraño que el Valencia pagué por mi fichaje 4 millones de euros, me firme un contrato de cuatro temporadas y apenas un año después no entre en los planes del nuevo entrenador.

-¿Alguien del club le dijo que no entraba en los planes de Claudio Ranieri?
-Sí, hablé con el propio entrenador y me comentó que era buen jugador, pero que mis características no se adaptaban a lo que él quería. A lo mejor no me conocía mucho. No lo sé. Está claro que es más fácil que se vaya un jugador que no dirá nada ni armará ningún escándalo que otros.

-Existe cierto debate sobre su demarcación. ¿Cuál es su posición ideal?
-He jugado en ambas bandas, principalmente en la derecha, aunque donde mejor me encuentro es de mediapunta por el centro. Espero jugar por esa zona.

-En la isla se ha reencontrado con Benito Floro, que le dirigió en el Villarreal. ¿Qué destacaría de su filosofía como entrenador?
-Cada técnico tiene sus métodos. De su estilo destacaría su apuesta por el buen fútbol. Es un entrenador al que le gusta tratar bien el balón y jugar desde atrás.

-¿En qué posición ubica al Mallorca 2004-05?
- No me gusta hablar de objetivos a largo plazo. Debemos pensar primero en el partido de Getafe y después en el siguiente y así sucesivamente. Hay equipo para aspirar a grandes cosas, pero debemos ir paso a paso.