Carlos Montes de Oca16/05/04 0:00
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El resultado de Riazor ha reducido hasta el trámite el último partido del Mallorca en Son Moix, un estadio que durante el presente curso ha vivido más decepciones que alegrías. El grupo de Luis echa el cierre a una de sus peores temporadas de su historia como local -ha perdido 31 puntos en Palma- recibiendo la visita de un Espanyol que la pasada semana asomó la cabeza a la superficie después de pasarse todo el torneo sumergido en el pantano de la Liga (Son Moix, 17.30 horas). La hazaña de Chamartín allanó el camino definitivo rumbo a la salvación. El Mallorca dio síntomas evidentes de recuperación en el Bernabéu y su reivindicación como equipo con un histórico 1-3 que le permitió asomar la cabeza en el terreno de la tranquilidad. Con la salvación en el bolsillo, el Mallorca quiere brindar a la afición un triunfo, el cuarto consecutivo, que le sirva para mejorar su aspecto en la clasificación y acabar «dignamente» (según Luis Aragonés) una temporada plagada de baches.

La baja de última hora de Finidi George, que fue operado del pómulo derecho (ver apoyo), obligó a Luis Aragonés a facilitar una lista de diecinueve jugadores, de la que después se cayó el nigeriano, destacando las novedades de Colsa y Nagore y la ausencia de Niño. Si el nigeriano, finalmente, no se recupera, el técnico madrileño se vería obligado a variar de nuevo alguna pieza. La opción más probable es que Alejandro Campano regrese a su banda natural, la diestra, después de las últimas citas en el carril opuesto, y que el brasileño Nené se ubica en la izquierda desde el inicio. Otra de las novedades apuntará al centro de la defensa. Allí se situará Miquel Angel Nadal, que regresará a la titularidad más de dos meses después, en concreto desde el pasado 7 de marzo, cuando formó pareja con Iván Ramis en el Nou Camp.

Así las cosas, el último once inicial del Mallorca que pise Son Moix en la presente temporada estará formado por Leo Franco en la portería, Cortés, Nadal, Lussenhoff y Poli en defensa con Marcos y Pereyra en el doble pivote, Finidi o Campano y Campano o Nené en las bandas, con Samuel Etoo y Andrija Delibasic en ataque. Completan la convocatoria Miki Garro, Edu Moya, Iván Ramis, Arnold Bruggink, Jesús Perera, Gonzalo Colsa y Txomin Nagore. Uno de los alicientes del encuentro estará en evitar que el Real Mallorca iguale su récord negativo en el capítulo de derrotas como local. El grupo balear ya totaliza siete derrotas caseras en el presente campeonato y está a sólo una de igualar su peor registro, fijado en 8 desde la temporada 1991-92, la de su último descenso a Segunda División. Enfrente, el Mallorca tendrá a uno de los mejores equipos de la segunda vuelta, un Espanyol que ha logrado acallar a los agoreros que le habían descendido hace varias jornadas. La conexión Iván De la Peña-Raúl Tamudo es la clave de la resurreción blanquiazul. Luis Fernández no tiene lesionados ni sancionados, e incluso recupera a Moreno Torricelli, baja obligada la pasada jornada al haber visto la quinta tarjeta amarilla del primer ciclo.