Campano eleva al Mallorca (2-1)

Xisco Cruz
En pleno proceso de mejora, cuando el equipo está todavía en fase de crecimiento, el Mallorca ha descubierto a sus extremos. La noticia la ha desvelado Campano, que ha querido zanjar el debate generado con la llegada de Finidi firmando un par de buenos partidos. Pero también Nené, que apenas juega veinte minutos, pero que suelen ser suficientes. Ayer los dos se bastaron para rajar al Betis, que puso sobre la arena todo lo que tenía, pero fue insuficiente. Movieron al equipo, zarandearon al rival, y de su pegada nació la victoria, que se hizo esperar. El equipo de Luis Aragonés se ha encontrado de repente con tres triunfos consecutivos, y amenaza con despegar porque su dinámica es positiva.

El encuentro amaneció con prisas, porque Betis y Mallorca tenían urgencias. En apenas seis minutos Nené ya había lanzado un tiro blando tras un golpe franco, e Ito le había sacado las astillas al travesaño después de conectar un derechazo que tuvo prolongación en un inocente remate de cabeza de Joaquín, que murió en las manos de Leo Franco. El vértigo le fue mejor al equipo balear, que descubrió que tenía extremos; Nené se hizo fuerte en la izquierda, y su verticalidad evidenció las carencias de Juanito, un central desplazado a la orilla y que sufrió a cada arreón del brasileño. Campano encontraba espacios por la derecha, y el Mallorca se sentía cómodo. En una de esas, el sudamericano trazó una carrera por su banda, metió el balón al segundo palo y el sevillano acertó con la volea (minuto 25). El Betis, que poco antes había marrado dos opciones en un minuto -un mano a mano de Ismael y un tiro a puerta vacía de Joaquín- echó mano de lo que tenía, y puso el balón en las botas de Joaquín, su principal activo. El andaluz por un flanco, e Ismael por el otro, le dieron un revolcón a la cita, que pasó a ser gobernada por los verdiblancos. El empate nació en una jugada por la izquierda, con un slalom del internacional bético y un remate mordido de Palermo que, tras tropezar en la espalda de Niño, se alojó en la red (minuto 37). El grupo de Víctor Fernández encontraba premio a sus mejores minutos.

Con el partido equilibrado y los dos equipos cargados de miedo, Aragonés decidió meter a Correa en la izquierda y a Bruggink arriba, en busca de mayor dinamismo. Con todo, el choque ya estaba en manos de Joaquín, que siempre encontraba la puerta abierta. Una carrera suya puso en la cabeza de Palermo la opción de liquidar el encuentro, pero el escorzo del argentino salió alto. El Betis había metido el balón en la nevera, y el Mallorca apenas encontraba ya oxígeno por las bandas, que eran propiedad de Joaquín. Fue entonces cuando Aragonés volvió a manejar el banquillo, y metió a Raúl Martín en la derecha. Eso obligó a Campano a reciclarse como administrador de la pelota, y gracias a su buen manejo llegó el segundo; el rojillo avanzó con el cuero sin oposición, se encontró al borde del área y lanzó un derechazo que superó la estirada de Contreras (minuto 82).

El Betis notó el golpe y apenas tuvo fuerzas para reponerse, porque además los minutos se consumían. Acabó entregándose y rendido a la contundencia del Mallorca y de Campano.

El central andaluz Fernando Niño vio la quinta cartulina amarilla en el encuentro ante el Real Betis Balompié y se perderá la próxima cita mallorquinista, ante el Villarreal, por sanción. El zaguero, que venía ocupando plaza en el eje junto al argentino Federico Lussenhoff, dejará su plaza posiblemente a Javier Olaizola, que ayer vio el encuentro desde el banquillo. Miquel Àngel Nadal sigue en la enfermería debido a unos problemas en la espalda. Mientras, Luis Aragonés recupera a Marcos Martín, que no pudo actuar ante los béticos por sanción y que regresará a la lista.