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Apenas hace tres semanas era impensable que Manzano pudiera siquiera acercarse a cualquier récord, a algún registro extraordinario en la historia del Mallorca. Sin embargo, las tres victorias consecutivas han disparado al equipo y han obligado a echar mano de los números, de la estadística, porque los cinco triunfos que consiguió Luis Aragonés en la temporada 2000/01 "algo que supone el mayor pico de rendimiento balear" ya están algo más cerca. Si los rojillos ganan a Osasuna firmarían el cuarto triunfo consecutivo, algo que dejaría a los insulares muy cerca de igualar el récord del técnico de Hortaleza.

Dijo en su día Aragonés que el Mallorca estaría arriba si cerraba el campeonato con un par de buenos resultados. Y fue así, porque los bermellones finiquitaron el torneo con una concatenación de victorias que se inició ante el Celta el 13 de mayo de 2001; dos goles de Finidi abrieron el camino de un registro notable, que todavía nadie ha logrado equilibrar. Los mallorquines venían entonces de perder en su visita precisamente al campo del Osasuna (1-0). El conjunto de Ciutat lograba la segunda victoria el 20 de mayo en su desplazamiento a Montjuïc (0-1), para confirmar la excelente trayectoria en Liga en el estadio de Son Moix frente al Rayo Vallecano. El Mallorca certificó su excelente estado de salud en Mendizorroza ante el Alavés de Mané, donde logró un contundente triunfo (2-4). La quinta victoria llegó en el último partido de Liga de aquella temporada; los mallorquinistas cerraban el campeonato ante el Oviedo, que se jugaba el descenso. Los de Aragonés ganaron 4-2.