El césped de Sant Ferran se extendió a modo de alfombra a la hora
de reconocer los méritos más deportivos del fútbol base insular. La
fiesta del juego limpio destacó el comportamiento de los vencedores
y todos pudieron recoger un trofeo que acredita una actitud a
seguir.
Los integrantes del Círculo Sollerense infantil se proclamaron
vencedores absolutos y se hicieron merecedores de un regalo muy
especial procedente del Real Mallorca, que consiste en un abono
para cada jugador con el que podrán presenciar los partidos que el
equipo dispute en el Estadi de Son Moix.
Además, la Banca March regaló gorras y camisetas a técnicos y
delegados, Cobega repartió Coca-Cola entre los ganadores y
Donuts-Panrico endulzó la tarde a los chicos a base de algunos de
sus productos. La Federación Balear se sumó a la celebración y
ofreció diez balones para cada uno de los conjuntos.
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