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Efe ULSAN (COREA DEL SUR)
José Antonio Camacho, técnico de la selección española, aseguró ayer que introducirá cuatro o cinco cambios en el partido contra Suráfrica, pero que el objetivo es obtener el tercer triunfo consecutivo sin especular con el marcador.

«Queremos ser los primeros del grupo. No sabemos salir a empatar, no tenemos cultura de ello, por eso habrá que jugar como desde el primer día, porque hemos venido aquí a ganar partidos», indicó Camacho, quien tampoco tiene preferencias de un rival para octavos.

A España le basta un empate para terminar en la primera posición, pero si pierde ante Suráfrica el liderato será para el equipo de Jomo Sono. El sorteo deparó que los dos primeros conjuntos del grupo B se cruzarán con los del E, en el que pugnan por pasar Alemania, Camerún e Irlanda, y que se decidirá mañana, un día antes del compromiso de Daejeon.

«No podemos decir: vamos a perder para ser segundos. Es una locura. Ya jugaremos contra un rival u otro, ya se verá como quedan ellos, que se la jueguen ellos y el mejor será primero y el otro segundo. Nosotros tenemos que mirar lo nuestro, la fortuna dirá. No se puede saber», indicó el seleccionador español, quien, lógicamente, calificó a Alemania, el 'ogro' del grupo E, de un «equipo fuerte sobre todo físicamente» Camacho no quiso anunciar el número exacto ni los nombres de los jugadores que serán novedad en el encuentro de mañana, si bien indicó que podían ser hasta cinco porque aseguró que los internacionales «están trabajando bien» y se merecen la oportunidad. Camacho recomendó ir «paso a paso», asegurar la primera plaza del grupo y luego ya pensar en el encuentro de octavos de final contra el rival que sea.

«La mentalización con la que se ha llegado es conseguir un objetivo: hacer un gran papel en el Mundial, y tiene que ser en el aspecto individual y de todo el equipo», dijo.