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1 MOTRIL: José Luis (H), Velasco (H), Samuel (H), Martínez (HH), Castillo (HH), B. Soria (H), Masegosa (H), Arenaza (H), Marín (HH), Ortiz (HH) y Diego López (H)
Cambios: Matías (H) por Diego López, Raúl Martín (-) por Arenaza y Fabián (H) por Masegosa.
1 MALLORCA: Alberto (HH), Herrero (H), Julio (HH), Buades (HH), Amate (H), Viale (HH), Reynés (HH), Juanlu (H), Chando (H), Riera (HHH) y Tuni (HH)
Cambios: Güiza (HH) por Chando y Quique (H) por Juanlu.
Àrbitro:
Pérez (Colegio Murciano). Amarilla a Velasco, Burgos, entr. Montero, Julio, Juanlu y Tuni. Expulsó por doble amonestación a Samuel (minuto 63).
Goles:
1-0, minuto 28, Marín, de penalti.
1-1, minuto 67, Buades.

Àrea 11 MOTRIL
El Mallorca B se presentaba en casa del líder después de una buena racha de resultados que le han permitido coger aire para afrontar la recta final del campeonato con las esperanzas de salvar la categoría. Aunque delante tenía a un equipo dolido por el claro resultado adverso de la semana anterior ante el Ciudad de Murcia (3-0). Por eso, los locales serían, si cabe, todavía más peligrosos, ya que querían reivindicarse ante su afición y demostrar que lo de la semana pasada no fue más que un tropiezo aislado. Pero ayer se encontraron con un equipo que les supo plantar cara a la perfección y se llevó un punto con todo merecimiento.

En la primera parte el Mallorca B decidió no arriesgar demasiado y prefirió que fuese el Motril el que llevase la iniciativa del partido. Y así fue. Los locales cogieron con rapidez el mando del partido y el dominio de la pelota. Pero no tuvieron claras oportunidades de gol porque el Mallorca B supo jugar con tranquilidad y sin perder la consistencia en defensa.

A pesar de esta situación, un claro penalti sobre Marín, que se encargaría de transformar él mismo, colocó el uno a cero en el marcador. Antes del gol, los locales tuvieron un par de ocasiones para definir con claridad, pero el desacierto permitió al Mallorca B mantenerse dentro del partido.

En la asegunda parte el Mallorca tuvo más posesión y más control del juego. El equipo se fue hacia delante. Esta situación, y la expulsión del local Samuel, fue determinante para la suerte final del partido. Después de un saque de esquina, Buades empataba.