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Miguel Vidal Saturnino Grech Palomares, Satur Grech en el mundo del fútbol, nació en Alicante el 6 de junio de 1914, pero en 1942 se vino a vivir a Palma, ciudad donde residiría siempre que sus obligaciones futbolísticas no se lo impidieran y donde falleció en el 2000 con ochenta y seis años de edad. «Me siento tan mallorquín como el que más», aseguraba este hombre que es una auténtica leyenda del fútbol mallorquín y español.

Especialmente como entrenador, donde tiene en su haber el haber llevado por primera vez a la U.D. Las Palmas a Primera División en la temporada 1950-51, jugado la Copa de Europa 1957-58 con el Sevilla y alcanzado el liderato de Primera División con el Mallorca en la temporada 1961-62. Además entrenó al Constancia, Hércules, Ferrol, Compostela, Tenerife y Lleida. Suya es la frase que un entrenador viaja con una maleta con ruedas. Casado con la palmesana Carmen Moncada Cañellas y padre de cuatro hijos, Cristina, Joaquín, Ana y Carmen, Satur Grech era jugador del Mallorca cuando este equipo ascensió por primera vez a Segunda División, la temporada 1943-44. Antes había jugado en el Murcia, Cartagena y Sabadell. Era un lateral rápido y fuerte.

Satur Grech como entrenador, pero también como futbolistas hubo mallorquines que triunfaron en el Las Palmas después de haberlo hecho en el Mallorca. El primero de ellos ciertamente de forma rocambolesca, porque Jaime Alorda Cabot era la gran figura del Atlético Baleares cuando, por una cacicada del entonces gobernador civil de Balears, Pardo de Santayana, fue obligado a reforzar el Mallorca, que luchaba por mantenerse en Segunda División la temporada 1949-50. Después volvió al At. Baleares, con el que ascendió a Segunda División la temporada 1950-51. Alorda se casó el 10 de junio de 1953 con Maria Teresa Guasp Oliver, fue de viaje de novios a Las Palmas y se quedó allí. Con el Las Palmas ascendió a Primera División la temporada 1953-54.

Miguel Sans, nacido en Palma en 1930, jugó en el Mallorca de 1948 hasta 1953 en que fichó por el Las Palmas, donde coincidió en Segunda con Jaime Alorda y la última de las dos temporadas que jugó en Primera División, la 1955-56, coincidió con otro mallorquín y ex mallorquinista, Antonio Morro, que llegó a Las Palmas procedente del Real Valladolid.