La Real Federación Española de Fútbol (RFEF) denegó la solicitud de
los jugadores rumanos Constantin Galca, del Espanyol, y Gica
Craioveanu, del Villarreal, y del argentino Ariel Ibagaza, del
Mallorca, de trámite de las licencias federativas «como
comunitarios o asimilados de comunitarios». La RFEF, a través de
una nota de prensa, explica que ni Galca, Craioveanu e Ibagaza
podrán tramitar su condición de comunitarios porque va en contra de
la legislación y el Reglamento General, aunque una vez ya agotada
la vía federativa podrán recurrir al Consejo Superior de Deportes.
Otra de las razones en las que se ha apoyado el máximo organismo
del fútbol español para denegar el trámite y en las que se exime de
toda culpa, es en que «la RFEF no mantienen vinculación laboral
alguna con ninguno de ellos, por los que sus derechos y deberes
laborales se derivan de los contratos con sus clubes». «La
limitación se proyecta única y exclusivamente sobre el club que le
ha contratado y tan sólo en su momento específico en el que se
concreta en la alineación simultánea de tres jugadores no
comunitarios», prosigue el comunicado.
Ninguno de los tres pertenece a ninguno de los países miembros
de la Unión Europea, y la negativa de la RFEF se ciñe al acuerdo
que firmó junto con la Liga Nacional de Fútbol Profesional y la
Asociación de Futbolistas Profesionales.
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