Como ya se supo el martes, las desorbitadas pretensiones de la
Real Federación Motociclista Española (RFME) para que la prueba de
motos disputase alguna jornada en territorio nacional, obligaron a
la organización de la carrera, la Thierry Sabine Organization
«TSO», tras una reunión con su representante oficial en España,
RPM, representado por Juan Porcar, a anular etapa. Así, las motos
se limitaron a pasar en caravana para goce de los aficionados. Por
ello la general no sufre cambios y sigue comandada por el francés
Richard Sainct (KTM), ganador de las dos últimas ediciones, que
dispone de 54 segundos de ventaja sobre el español Joan Roma (BMW),
segundo, y 56 sobre el tercero, el italiano Giovanni Sala
(KTM).
En coches, el ganador de la tercera especial ha sido el francés
Jean Pierre Fontenay, ganador del Dakar de 1998. El piloto de
Mitsubishi ha marcado un tiempo de ocho minutos y veinte segundos y
ha aventajado en sólo dos segundos a Masuoka, que se ha convertido
en el tercer líder que hasta ahora ha tenido la vigésima tercera
edición del raid. Masuoka, que sucede en el comando de la prueba al
español Josep Maria Serviá y al francés Jean Louis Schlesser -ambos
con «buggy» Schlesser-, lidera el Dakar de coches con 46 segundos
de renta sobre éste, ganador de las dos últimas ediciones y que fue
decimotercero en la etapa de Castellón.
Pequeños incidentes con el Frente
Polisario
Una veintena de miembros y simpatizantes del Frente Polisario
protagonizaron diversos incidentes en el inicio de la etapa del
Rally. Los manifestantes, algo más de medio centenar según el
portavoz del Frente Polisario, Mohamed Alí Salem, han bloqueado por
la fuerza la entrada a las instalaciones en la playa castellonense
del Pinar de los participantes en el rally y han retrasado la
salida de la prueba cronometrada.
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