Rostro circunspecto el que exhibió Mario Gómez en la sala de
prensa. No era para menos. A su equipo se le escurrió la victoria
en apenas un minuto y también en unos pocos segundos se quedó sin
nada. El técnico balear, foco de atención en las horas previas al
primer duelo tras los problemas surgidos para tramitar su licencia,
resumió el deselnace final del duelo en un par de frases: «Perder
de esta forma duele mucho, muchísimo; teníamos el partido ganado»,
subrayó el preparador argentino en su encuentro con los
periodistas. «Pero tampoco tenemos mucho tiempo para lamentarnos
"añadió.
Gómez abundó en su análisis del primer partido de la Liga
señalando que «en el segundo tiempo hemos perdido el balón con
cierta facilidad, pero el Real Madrid tampoco llegaba. Los goles
que hemos encajado fueron sorpresivos y también por errores
nuestros». El técnico evitó polemizar sobre el conflicto en el que
ha vuelto a verse inmerso en la apertura del campeonato nacional. A
Mario Gómez no se le reconocen tres años de experiencia en el
fútbol argentino y esta circunstancia imposibilita la tramitación
de su ficha como entrenador en España.
«Estoy convencido de que todo se va a solucionar. Ahora mismo no
contemplo otra cosa que ser entrenador del Mallorca. Toda mi
documentación está en regla porque la dupla que formé en
Ferrocarril Oeste equivale a ser entrenador de Primera División en
España. Hemos remitido nueva documentación y todo se
arreglará».
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