La contratación de José Luis Oliete parece haber caído en vía
muerta. El Bàsquet Inca, que durante la jornada de ayer esperaba
dar un nuevo paso al frente y dejar prácticamente perfilado el
fichaje del técnico aragonés, interpreta que el hombre que durante
las tres últimas temporadas ha ocupado el banquillo del Menorca
duda en exceso y que varios clubes del mapa LEB han interferido,
presumiblemente Melilla, Huelva y Los Barrios.
Ningún componente del club inquense ha logrado contactar con
Oliete durante las últimas horas y su agente "José Ortiz" ha dado
argumentos excesivamente ambiguos que no han hecho otra cosa que
alimentar todo tipo de especulaciones. Oliete, que tras seguir las
evoluciones de la Liga de Verano de Fuenlabrada se encuentra en
Maó, parece estar sometido a una gran presión. En la isla vecina
nadie parece digerir la posibilidad de que trabaje en Inca durante
las dos próximas temporadas, circunstancia que ha acarreado al
aragonés varios problemas personales.
Este extraño giro en las negocaciones Bàsquet Inca-José Luis
Oliete se produce el mismo día en que la plana mayor del club debía
aprobar su contratación "incluso estaba previsto presentarlo en
sociedad esta misma semana" y la confusión es absoluta. «Todo esto
es muy extraño y no me gusta nada», subrayó a esta redacción el
presidente Rubert poco antes de reunirse con los integrantes de su
junta directiva en las oficinas del Palau d'Esports. José Luis
Oliete es el único nombre que manejaba el Bàsquet Inca para su
nuevo proyecto, aunque en las próximas horas pueden precipitarse
los acontecimientos.
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