UD Las Palmas: Barbosa; Ángel López (Chrisantus, min. 82), Aythami Artiles (Valerón, min. 46), Deivid, Xabi Castillo; Vicente Gómez, Apoño; Nauzet Alemán, Asdrúbal, Masoud; y Máyor (Tana, min. 46).
Real Murcia CF: Casto; Molinero, Truyols, Dos Santos, Alex Martínez; Acciari, Dorca; Tete (Albiol, min. 88), Eddy (Toribio, min. 51), Saúl (Wellington Silva, min. 71); y Kike García.
Árbitro: Mario Melero López (Comité Andaluz). Expulsó por doble tarjeta amarilla al jugador visitante Acciari (minutos 22 y 25). Además, amonestó a sus compañeros Dos Santos, Eddy y Truyols, así como a los locales Masoud, Vicente Gómez, Ángel López, Deivid y Nauzet Alemán. Expulsó al entrenador del Murcia, Julio Velázquez, en el minuto 73, tras haberle amonestado en el 58.
La Unión Deportiva Las Palmas no fue capaz de ganarle al Real Murcia en un partido que quedó condicionado desde el minuto 25 por la expulsión del visitante Acciari, al ver dos tarjetas amarillas en sólo tres minutos.
El veterano centrocampista argentino vio la primera por una falta a Máyor, y confiado en que el árbitro no le enseñaría la segunda, hizo una dura entrada a Vicente Gómez que le costó la expulsión.
Hasta ese momento, Las Palmas había llegado más al área rival, con ocasiones para Vicente Gómez, Aythami Artiles y Nauzet Alemán, pero también la tuvo el visitante Kike García con un disparo cruzado que se marchó cerca del poste derecho de Barbosa.
De forma paradójica, cuando el Murcia se quedó en inferioridad creó mucho más peligro y los canarios desaparecieron. El propio Kike García remató fuera desde cerca, tras una jugada del examarillo Saúl Berjón por la izquierda, y Dos Santos cabeceó alto en buena posición, a la salida de un córner.
La indignación de los futbolistas granas se acentuó cuando Melero López no sancionó un claro penalti de Xabi Castillo a Tete, cuando el habilidoso extremo ganaba la línea de fondo.
Las Palmas hizo dos cambios tras el descanso, y pese a no tener un ariete de referencia, tuvo acercamientos peligrosos casi siempre originados en las botas del iraní Masoud.
El Murcia, pese al desgaste defensivo propio de su inferioridad y el esfuerzo solidario de todos sus futbolistas, no renunció al ataque y Kike García puso otra vez a prueba a Barbosa.
Los insulares arriesgaron en el tramo final con la entrada de Chrisantus pero no encontraron la forma de deshacer el nudo del equipo grana, que obtuvo un valioso punto como premio a su enorme esfuerzo colectivo durante más de una hora de juego con un futbolista menos.
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