Javi Martínez intenta controlar el balón ante Chiellini y Andrea Pirlo. | Efe - ALESSANDRO GAROFALO

TW
1

ITALIA: Buffon; Maggio, Ranocchia, Chiellini, Criscito; De Rossi, Pirlo, Motta; Montolivo; Rossi y Cassano.

Cambios: Marchisio por Motta, Pazzini por Rossi, Balotelli por Cassano, Aquilani por De Rossi y Bonucci por Ranocchia.

ESPAÑA: Casillas; Iraola, Piqué, Raúl Albiol, Arbeloa; Javi Martínez, Xabi Alonso; Iniesta, Cazorla, Silva; y Fernando Torres.

Cambios: Llorente por F. Torres, Busquets por Piqué, Villa por Iraola, Valdés por Casillas, Thiago por Iniesta y Mata por Cazorla.

Àrbitro: Felix Brych (GER). Amonestó a Chiellini (66) y a Balotelli (90) por Italia, y a Arbeloa (56) por España.

Goles:

1-0, minuto 11, Montolivo

1-1, minuto 37, Xabi Alonso (pen.)

2-1, minuto 83, Aquilani

Un gol a siete minutos del final de Alberto Aquilani, con la fortuna en un disparo que desvió Raúl Albiol, decantó para Italia un duelo con poco de amistoso entre los dos últimos campeones del mundo (2-1), en el que España no estuvo a la altura, lastrada en defensa, víctima de numerosas lesiones.

España no pudo salvar uno de esos días en los que tiene más que perder que ganar. Cuando el prestigio se pone en juego entre dos campeones mundiales. Ante una Italia que necesitaba una inyección de optimismo en su reconstrucción. Delante de su apasionada afición en Bari que vio en las cuerdas a la 'Roja', su reacción y una derrota con dignidad, condicionado por sus problemas defensivos.

Pauta

Dos futbolistas de la vieja escuela, Andrea Pirlo y Antonio Cassano, marcaron la pauta en pleno relevo generacional de la 'azzurra'. La alta intensidad con la que comenzaron el partido sorprendió a España. Asfixiada en la presión. Estudiada al detalle.

Con el control, jugando la pelota y buscando espacios, Italia desarboló a España. Encontró una autopista a la espalda de Iraola y se destapó el lateral Criscito. Un zurdazo potente lo estrelló en el palo y un preciso pase dejó solo a los once minutos a Montolivo ante Casillas. Con calidad picó el balón a la red.

España no encontraba el balón, le faltaba velocidad, intensidad y orden. Para colmo de males Fernando Torres sufría una conmoción cerebral y pedía el cambio.

Las limitaciones defensivas marcaban a España. Si adelantaba líneas sufría. Solo había cinco defensas citados, fueron cuatro por lesión de Monreal. Obligó a Piqué a arriesgar. Llegaba con molestias musculares y aguantó 45 minutos. Apareció Casillas, salvador en un mano a mano ante Criscito.

Instantes después España encontraba un premio excesivo a sus méritos. Fernando Llorente fue empujado cuando iba a rematar un centro desde el costado izquierdo y el árbitro no lo dudó. El penalti lo transformó Xabi Alonso.

El examen se complicó con las lesiones y los pocos efectivos en defensa. Del Bosque improvisó con Busquets de lateral derecho por lesión de Iraola y Javi Martínez de central por Piqué.

Mantuvieron el tipo como pudieron. Exigidos con los cambios ante la velocidad de Balotelli y Pazzini. Las numerosas sustituciones de un amistoso dejaron el debut de Thiago.

Valdés respondió ante una falta colocada de Pirlo pero nada pudo hacer cuando la fortuna se alió con Aquilani. Su disparo golpeó en Raúl Albiol y cambió su trayectoria. Era el triunfo de Italia. Una advertencia para España. Desde ahora, Del Bosque convocará más defensas.