Milan Suskavcevic, Sean McDonnell, Guillem Boscana, Vicenç Palmer, Pol Figueras y Álex Pérez, en la oficina de Palmer Alma Mediterránea. | Jaume Morey

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Sin presión, con los deberes hechos y dispuestos a alargar una temporada casi perfecta hasta el mes de junio, los jugadores, técnicos y directivos del Palmer Alma Mediterránea Palma ya cuentan las horas para abrir las series de ascenso a LEB Oro el próximo sábado (18:30 horas) en Lugo, frente a un histórico como el Leche Río Breogán. El segundo asalto se jugará el miércoles 26 (20:30) en Son Moix, y si fuera necesario el tercer, el cruce volvería a Galicia el sábado 29 (19 horas) para decidir qué equipo pasaría a las semifinales.

Se reedita el enfrentamiento de hace cuatro temporadas, en el que los gallegos se impusieron con sufrimiento (3-2) y que ratifica la buena dinámica del primer equipo del Bahía San Agustín en LEB Oro, con cuatro presencias en los playoffs en seis temporadas.

"El trabajo no ha acabado y vamos a dar el máximo. El objetivo, ahora mismo, es pasar a la segunda eliminatoria, y después será llegar a la final, pero paso a paso", afirmaba el presidente del Palmer Palma, Guillem Boscana, quien no escondía su vena ambiciosa, al afirmar que "el objetivo de este año sería superar lo de hace dos años. Y es algo ambicioso, porque sería subir a la ACB. Es mi sueño. A mí y a mucha gente le gustaría y es lo que intentaremos", añadía el mandatario en el encuentro con los medios en la oficina de Palmer Alma Mediterránea en el centro de la capital mallorquina.

Boscana le pone una nota "de 10 sobre 10" al equipo hasta el momento, "aunque falta poner la guinda al pastel. Si no nos fuera bien, le pondría un nueve como máximo. Nos lo hemos ganado", aseguraba el presidente.

Por su parte, uno de los técnicos del equipo de LEB Oro, Álex Pérez, destilaba la misma ilusión y ambición y dejaba claro que "a tres partidos, tenemos más opciones", en referencia a la duración de las eliminatorias, lo que resta ventaja a las plantillas con más fondo de armario en series al mejor de cinco encuentros.

"El factor sorpresa existe, tenemos un equipo joven y Breogán nos ganó sufriendo aquí", proseguía el preparador, que destacó el papel de Sidney Correia en sus primeros minutos con el equipo en Valladolid, reforzando la rotación interior y espera que el público "sea un factor extra de cara al miércoles y pueda disfrutar y ayudarnos a seguir adelante con nuestro sueño", añadía Pérez, quien confirmó que tiene ya a todos sus jugadores a su disposición.

Por su parte, el alero estaounidense Sean McDonnell, uno de los jugadores más regulares del plantel, comparte con su entrenador la idea de que un playoff corto "nos puede ayudar" y exige al equipo "estar concentrados", yendo a Lugo "a por la primera victoria, sólo podemos pensar en ese objetivo".

Las dos derrotas en la segunda fase frente al Breogán las interpreta McDonnell como una motivación extra y tiene claro que toda la presión es para el cuadro gallego y el Palmer Palma va a ir "a ganar".

Mientras, Milan Suskavcevic, uno de los jugadores que más ha evolucionado esta temporada, recuerda que el Breogán "tiene un objetivo claro, que es ascender. Pero nosotros también, que es intentar pasar ronda", y aunque ve difícil la serie "si les podemos ganar allí, será complicado que ellos le den la vuelta a la eliminatoria", destacando la frescura física de un Palma más joven y que "notaría menos tres partidos en una semana".

El pívot montenegrino remarca que Breogán "es un gran equipo", pero a la vez advierte que el Palmer Palma "no va renunciar a nada". Sobre su rol en el equipo, lamenta las lesiones que le han frenado en algunos momentos, pero se muestra "feliz por mi crecimiento, la oportunidad de jugar en esta liga y por conocer a unos compañeros que lo hacen todo más fácil".

En esa línea se mantuvo uno de los pilares del vestuario. El base Pol Figueras, director de orquesta del Palmer Palma y uno de los mejores jugadores en su posición de toda la LEB Oro esta temporada, destacó también "el ambiente del grupo" como clave para entender ese buen rendimiento, superando todas las expectativas y cerrando en marzo la permanencia.

Desde este punto, Figueras remarca la mentalidad ganadora del Palmer. "Vamos a ir a ganar el primer partido. Y, desde ahí, mantener la misma ambición para después ir a por el segundo", explicaba el base catalán, que define su temporada como "la más regular que he tenido en LEB Oro". Ahora, soñar es gratis y llegar "lo más lejos posible" es la meta del 'uno' y sus compañeros. "Podemos seguir creciendo, aunque sabemos que no será fácil, pues hay equipos con grandes plantillas y exigencias importante. Pero nosotros ahora tenemos mucho que ganar y poco que perder. Estamos en un escenario que era difícil de imaginar a principio de temporada y hay que vivir y aprovechar este momento", afirmó Pol.