‘Baklava’ de pistachos, crema de naranja y té verde helado. | ARCHIVO

TW
0

El otro día comí en El Hummus en el Mercat de l’Olivar de Palma. Terminé la comida con un par de trozos de baklava muy jugosos y me alegré mucho de haber encontrado en Palma uno de mis postres favoritos desde pequeña. El baklava es un postre tradicional que ha cautivado los paladares de personas en todo el mundo. Su origen se remonta a la época del Imperio otomano, aunque hay disputas sobre si su origen es en Turquía o Grecia. Sin embargo, se sabe que el baklava se popularizó y se convirtió en un elemento básico en toda la región del Medio Oriente, los Balcanes y el Mediterráneo.

La receta básica de baklava consiste en capas de masa filo, mantequilla o aceite, y un relleno de nueces, pistachos o almendras, todo ello empapado en un jarabe dulce de azúcar y miel. Sin embargo, las variaciones son infinitas y cada región tiene su propia versión única de baklava. En Grecia, por ejemplo, el baklava suele ser más crujiente y se prepara con almendras o nueces, mientras que en Turquía, se prefiere la nuez y el jarabe de azúcar de rosas. En los Balcanes, especialmente en Bosnia y Serbia, el baklava también es muy popular y se prepara de diversas maneras. Aunque me gusta cualquier tipo de baklava, mi favorito es con nueces y prefiero que sea más jugosa que seca.

Paso a paso. Ingredientes: 1 paquete de masa filo, 250 g de nueces picadas, 200 g de mantequilla derretida, 200 g de azúcar, 240 ml de agua, 120 ml de miel, 1/2 cucharaditas de jugo de limón, 1 cucharadita de extracto de vainilla, 1 cucharadita de canela en polvo. Para la receta, precalienta el horno a 175°C. Engrasa un molde para hornear con mantequilla. Mezcla las nueces picadas con la canela en un tazón y reserva. Coloca una hoja de masa filo en el fondo del molde y cepilla con mantequilla. Repite este proceso, agregando capas de masa filo y mantequilla hasta usar la mitad de la masa filo. Espolvorea la mitad de la mezcla de nueces sobre la capa de masa filo. Continúa agregando capas de masa y nueces, terminando con una capa de masa filo en la parte superior. Corta el baklava en cuadros o diamantes. Hornea durante unos 45-50 minutos, o hasta que esté dorado y crujiente. Mientras tanto, prepara el jarabe. Hierve el agua y el azúcar hasta que se disuelva.
Retira del fuego y agrega la miel, el jugo de limón y el extracto de vainilla. Vierte el jarabe caliente sobre el baklava recién salido del horno. Deja reposar y enfría antes de servir.