Buñuelos de viento para el Día de las Vírgenes

Típicamente, tienen un tamaño un poco más grande que una nuez o una pequeña albóndiga, lo que los hace ideales para comer en un solo bocado. Su color es un dorado claro, que se vuelve más oscuro en las partes donde la masa se ha inflado durante la fritura. El exterior es crujiente, mientras que el interior es ligero y aireado, lo que les da su nombre de «buñuelos de viento». Existen diversas variedades de buñuelos, como los rellenos de chocolate, nata, crema pastelera o incluso versiones saladas. Sin embargo, los buñuelos de viento son los más simples y tradicionales, y suelen espolvorearse con azúcar glas o azúcar y canela. Además de las festividades religiosas, los buñuelos de viento también son populares en ferias y mercados, y son un dulce que disfrutan tanto niños como adultos. Espero que después de leer mi columna os animéis a preparar estos deliciosos buñuelos de viento en casa. ¡Buen provecho!

Receta casera de buñuelos de viento. Ingredientes: 1 taza de agua, 75 g de mantequilla, 1 pizca de sal, 1 taza de harina de trigo, 3 huevos, aceite para freír, azúcar glas para espolvorear. Elaboración: Poner a hervir el agua con la mantequilla y la sal en una cacerola. Cuando esté hirviendo, añadir la harina de golpe y remover con una cuchara de madera hasta que se forme una masa que se despegue de las paredes del recipiente. Retirar del fuego y dejar enfriar unos minutos. Añadir los huevos uno a uno, mezclando bien después de cada adición. Calentar el aceite en una sartén o freidora a 180ºC. Usar dos cucharas para formar pequeñas bolas de masa y freírlas en el aceite caliente hasta que estén doradas. Sacar los buñuelos del aceite y dejarlos escurrir en un papel absorbente. Espolvorear con azúcar glas y servir.