Una lámpara para secar la manicura. | Freepik

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La manicura semipermanente, popular por su durabilidad y brillo, requiere el uso de lámparas UV o LED para secar el esmalte. Este proceso, aunque eficaz para lograr resultados estéticos deseables, no está exento de riesgos para la salud, especialmente en lo que respecta a la exposición a la radiación ultravioleta. La exposición repetida y prolongada a esta luz puede incrementar el riesgo de envejecimiento prematuro de la piel y de cáncer de piel, incluyendo melanoma en las manos.

Expertos en dermatología y cuidado de la piel recomiendan encarecidamente la aplicación de un protector solar de amplio espectro en las manos antes de someterlas a lámparas UV durante la manicura semipermanente. Estos productos deben ser capaces de bloquear tanto los rayos UVA como los UVB, proporcionando una barrera efectiva contra los daños potenciales de la luz ultravioleta. Idealmente, el protector solar debe ser aplicado unos 20 minutos antes de la exposición a la lámpara, para asegurar su efectividad.

Además de los protectores solares, existen otras alternativas como guantes especiales diseñados para proteger la piel mientras se dejan las uñas expuestas para su tratamiento. Estos guantes, fabricados con materiales que bloquean la radiación UV, son una opción práctica para quienes frecuentemente optan por la manicura semipermanente. Su uso ha sido alentado por diversos especialistas en salud y belleza como un método complementario o alternativo al uso de cremas solares.

El uso de estas medidas de protección no solo preserva la salud de la piel, sino que también contribuye a una experiencia de belleza más segura y consciente. Las lámparas LED, aunque generalmente consideradas menos dañinas que las UV, también requieren precauciones similares debido a que emiten radiación en el rango ultravioleta. Actualmente podemos encontrar 3 tipos de lámparas que se utilizan para la manicura semipermanente:

Lámparas UV: Son las primeras que salieron al mercado y las que más pueden afectar al fotoenvejecimiento del dorso de la mano. Estas radiaciones afectan al ciclo celular de los fibroblastos y al ADN. Necesitan de 2-3 minutos para curar/secar el esmalte, sirven para todos los esmaltes. Traduciéndolo, hacernos la manicura con lámparas UV es como si sometemos al dorso de las manos a 1,5 minutos adicionales al sol durante 2 semanas

Lámparas LED: Son más caras pero al tener mayor intensidad de radiación necesitan menos tiempo para secarlas, 45 segundos aproximadamente. Por lo que el tiempo de radiación es menor y el fotoenvejecimiento también.

Lámparas LED+UVA: Utilizan principalmente luz UV y sólo usan LED para activar los esmaltes que necesitan específicamente esta longitud de onda para activarse.

En resumen, mientras la manicura semipermanente sigue siendo una opción atractiva para muchos, es esencial adoptar prácticas de protección adecuadas para minimizar los riesgos para la salud. El uso de protector solar de alto espectro y guantes protectores son recomendaciones clave que los usuarios deben considerar para mantener sus manos jóvenes y saludables​.