De estilo campestre mallorquín, la casa está rodeada por un jardín impresionante, con su preciosa piscina infinity. | Porta-Mallorquina

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Construida en 1996, la casa conserva todos los elementos que adorábamos en los noventa, como las paredes estucadas, los suelos de baldosas y las cortinas coordinadas con el tapizado de los muebles y las colchas. Hoy todo eso se ha quedado atrás, pero lo interesante de una casa no es cómo está vestida, sino su esqueleto. Y el de esta casa es perfecto. En forma de L, cuenta con un apartamento de invitados de estilo vacacional. El resto se estructura en una sola planta que se abre a un precioso porche techado con columnas, a una gran terraza y, bajando unos peldaños, al jardín impecablemente cuidado y a la piscina infinity, que desborda en una cascada que desemboca en un estanque rodeado de vegetación.

Todo un paraíso de verdor desde el que se contempla el gran terreno que rodea la casa, el campo de golf de Vall d’Or y, al fondo, el mar. Dentro, tres dormitorios, tres cuartos de baño, un salón con doble altura de techo y chimenea, cocina y comedor separados por grandes puertas correderas, amplitud, luminosidad y ambientes prácticos y cómodos, con extras como la calefacción por suelo radiante.

Interiores

Salón: La chimenea de estilo tradicional preside el salón, que tiene acceso al porche techado.

Comedor: Situado junto a la cocina y con acceso al exterior, ocupa una esquina muy luminosa de la casa.

Cocina: La cocina, decorada en azul, está abierta al comedor, tiene techos altos y acceso al exterior.

Dormitorios: La casa tiene tres dormitorios amplios, con armarios empotrados y vistas al jardín.

El apartamento: Ambiente vacacional en el apartamento de invitados, que tiene un dormitorio, baño, cocina y salón.

Exteriores: El jardín está lleno de rincones encantadores, con la naturaleza muy presente

El alzado
Superficie: 230 metros cuadrados.
Parcela: 28.500 metros cuadrados
Lugar: Portocolom
Precio: 3.200.000 €
¿Qué la hace diferente? Una casa preciosa, relativamente reciente, con un jardín impecable. Aunque necesita una renovación decorativa, los amplios espacios, el apartamento, las vistas y el entorno hacen de ella una propiedad muy interesante.
Más información: www.porta-mallorquina.es