Guillem Febrer en el vivero que Estel de Llevant tiene en Manacor, donde se produce todo el plantel.

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La entidad Estel de Llevant, que trabaja con personas con trastorno mental, ha lanzado un nuevo proyecto social, que empezó a gestarse hace tres años y que el pasado diciembre vio la luz con la presentación de los tés e infusiones T’Estim. El gerente de la entidad, Guillem Febrer, cuenta que un total de 43 personas trabajan en este proyecto entre jóvenes estudiantes de agricultura y personas con discapacidad. En el vivero de Estel de Llevant se lleva a cabo el plantel de todas las plantas aromáticas, que después se siembran en la finca sa Vall de la Nou, donde se cultivan de manera totalmente ecológica. Explotan unas 3,5 hectáreas de terreno.

Entre las plantas aromáticas, Estel de Llevant siembra hierbabuena, menta poleo, lavanda, tomillo, manzanilla, romero, guardalobo... Febrer explica que «con estos cultivos elaboramos las infusiones, mientras que para los tés dependemos de distribuidores porque ese tipo de plantas no se puede cultivar en Mallorca por temas del clima». Las personas que participan en el proyecto de las infusiones se encargan de elaborar todos los pasos: desde hacer el plantel hasta embolsar las plantas y dejarlas listas para su consumo. Durante estos meses, se lleva a cabo la producción del plantel para, después, sembrarlo en febrero y recoger la producción entre los meses de mayo y julio. Febrer destaca que «las plantas aromáticas son muy ricas en antioxidantes y minerales y queremos explotar todos sus beneficios».

Para ello, Estel de Llevant iniciará una investigación sobre las nuevas formas de consumir las plantas aromáticas más allá de las infusiones y diseñará súper alimentos a partir de este tipo de plantas. «La Conselleria d’Agricultura, a través de Fogaiba, nos ha concedido una subvención para llevar a cabo esta investigación y hemos iniciado conversaciones con la UIB para cerrar un acuerdo de colaboración», adelanta Febrer. Con este proyecto, se estudiarán otras maneras de incorporar las plantas medicinales en nuestra dieta diaria sin la necesidad de tomar una infusión. Pero mientras se realiza este estudio, los alumnos de la formación dual de Estel de Llevant seguirán con el proceso de elaboración de las infusiones puras (de una sola planta) o hechas a partir de la mezcla de diferentes plantas con propiedades medicinales específicas.

Durante la campaña 2021–2022 se han producido 250.000 bolsas de infusiones bajo un sistema totalmente ecológico. Los participantes en el programa se encargan de la recolecta de la planta y su posterior traslado al secadero solar, para después deshojar las plantas de manera manual. Una vez trituradas las hojas y se pasan por tamices especiales para obtener solo la hoja, sin impurezas, que se embolsa para su posterior distribución. «Estamos muy contentos del resultado porque, además de tener un carácter social que no podía faltar, hemos conseguido sacar al mercado un producto de calidad», dice Febrer.