El pasado sábado 23 de septiembre, autoridades políticas, responsables de las áreas de Cultura de las instituciones isleñas y galeristas comenzaron la ruta de la Nit de l'Art cuando aún incidían los rayos de sol sobre las fachadas de los locales expositivos. Fue al anochecer cuando las calles se vieron repletas de público amante del arte en todas sus expresiones.
La calle Sant Feliu, con la obra de Andi Fischer en Kewenig Palma, y la de Sant Jaume, donde Josep Santamaria presentaba una exposición individual en dos espacios a la vez: Galería Xavier Fiol y Pep Llabrés Art Contemporani, eran casi tan difíciles de transitar como la ruta que conducía a La Misericòrdia y su recién estrenado Aljub, donde se formaron colas para contemplar las obras de Stefan Rinck y Trine Sondergaard, de CCA Andratx; Grip Face y Miju Lee, de La Bibi Gallery; y Susana Solano, Victoria Civera, Eulàlia Valldosera y Andrés Talavero, de la Galería Maior de Pollença.
El programa de exposiciones y actividades organizado por la asociación de galerías Art Palma Contemporani marcaba el inicio de la temporada artística balear, pero en el recorrido no se podían dejar de contemplar las propuestas del ‘Art al Carrer’, paralelas a las de la asociación presidida por el galerista Fran Reus, como la organizada por Arte Visión, que presentó en la Plaça Major los trabajos de pintores, escultores y fotógrafos, exponiendo al aire libre, ni la obra impactante de Lolo Garner y Biel Mulet Panizza El Efecto Mariposa, que inauguró el padre Ángel, al frente de Mensajeros de la Paz, llegado expresamente a Palma para apoyar el compromiso social y humanitario de la monumental obra en colores y luz.
Largas colas también para admirar las exposiciones que se ofrecían en el Casal Solleric, donde el público pudo apreciar cómo la artista Sandra Baía había interactuado con el edificio que se reflejaba en una bola inmensa de color dorado. De camino al Passeig del Born para acceder a otros espacios expositivos, la música del Dj Juan Campos atraía a los más jóvenes y no tan jóvenes. La música provenía de la tienda Multiópticas Borne, que por segundo año se sumaba a la Nit de l’Art de Palma. Javier Rosselló exponía allí obras de gran formato.
En Fran Reus mostraban la obra de Marian Garrido y Guillermo Ros, y la obra de Teresa Matas se exponía en la Abba Art Lab, la galería de las hermanas Bordoy. Pasada la medianoche, en las calles seguía sonando la música y las plazas cobijaban aún a compradores de arte en la vigésimo séptima edición de esta cita con las propuestas artísticas del invierno palmesano.
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