Guillermo Esteban Osorio, Begoña Martín, Jordi Muntaner, José Palma y Álex Nogueron. | Eugenia Planas

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Desafiando el viento gélido que azotaba la noche del pasado domingo 24 de febrero, los alumnos del Centre d’Ensenyament Superior Alberta Giménez vistieron sus mejores galas para lucir palmito por la alfombra roja donde se les inmortalizó como verdaderas estrellas.

La noche la pasarían en el salón de actos del centro compartiendo con profesores y jefes de estudios la magia de Hollywood  encarnada en los ganadores de la estatuilla y en un trabajo que se hace en la sombra,  como les han enseñado a muchos de ellos. La pasión por la “gran pantalla” quedó patente en las horas de vigilia que precedieron a sus clases habituales.

Los profesores se sumaron a la aventura de pasar una noche de cine y poner la guinda con unos humeantes cafés con ensaimadas. El telón se abría pasada la medianoche.  Una hora antes, el extenso equipo de producción y organización probaba el sonido, ajustaba la luminosidad de la pantalla y sugería detalles para conseguir un ambiente apropiado en una verdadera fiesta de cine.

En la pre-gala, antes de que comenzara la emisión en directo de la ceremonia de entrega de los Oscar, alumnos de Periodismo y Comunicación Audiovisual, amigos de éstos y amantes del cine, posaron en un photocall organizado en la entrada y disfrutaron de la actuación musical del dúo compuesto por Álex Noguerol y Cristina Latorre, que interpretaron temas de bandas sonoras que se disputaban el Oscar esa misma noche.

La hermana María Canel escrutaba, orgullosa, el trabajo del equipo de producción al mando de Mark Schlüter. Antes de seguir en silencio y con atención el veredicto de Hollywood, se comentaron los pronósticos de la porra solidaria donde todos votaron sabiéndose duchos en el tema. Al final, unos se sintieron decepcionados y otros vieron cumplidas sus expectativas. Luego vinieron los debates, la crítica y el sorteo de premios como packs de películas o entradas de cine.