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Me voy al hotel Saratoga, donde se ha inaugurado una exposición, y en el que también tuve el honor de asistir a la inauguración del restaurante del chef mallorquín Juan Pinel, un joven lleno de talento y saber estar que nos deleitó con un cóctel sorprendente, en el que llamó la atención sobre todo la pizza de ensaimada. Riquísima. Tras años trabajando para otros, Juan Pinel, acompañado de sus padres, su hermana y de los propietarios del Saratoga, se ha convertido en jefe de cocina del establecimiento. Según me contó, entre risas y mucho savoir faire, se nota que ha trabajado en la Costa Azul.

Desde niño sabía que quería dedicarse a los fogones y, curiosamente, siendo tan joven ha conseguido una de las grandes ‘plazas’ de Palma. Los altos del Saratoga son míticos, así que deberá estar a la altura para poder conquistar a un público cada vez más exigente. En cuanto a la pintura que el hotel expone de Arte Visión, se pueden ver obras de Araceli Déniz, Diego Conesa y Ernesto Rodríguez, que cierran el ciclo de esta temporada. Araceli es canaria, pero mallorquina de adopción. Su arte nace de su interés por mediar entre personas en conflicto, es pedagoga y psicóloga. Se define como arteterapeuta. Dejar fluir los sentimientos sobre un lienzo es la mejor de las ayudas para el cerebro que uno puede imaginar.

Diego Conesa, murciano pero residente en Mallorca desde hace casi 40 años, nos trae El viaje soñado, once acuarelas de tema monográfico que se pueden ver en la planta baja del hotel. Mientras que Ernesto Rodríguez Nogueira, cubano de nacimiento, pero también mallorquín de corazón, es discípulo del gran Riera Ferrari, y un rebelde, innovador, creativo y listo, siempre en busca de matices diferentes. Visiten la expo y disfruten del gran Juan Pinel. Es un planazo. Sigo con una grande, mi adorada Miriam Nogueira Loira de Creativity Events.