El detenido se cubrió el rostro al entrar al juzgado de guardia de Vía Alemania. | Alejandro Sepúlveda

TW
5

Lo hizo por un ataque de celos. Esta es la conclusión a la que han llegado los agentes del Grupo de Homicidios de la Policía Nacional tras la detención de un argentino, de 31 años, acusado de propinar una brutal paliza a un hombre y lanzarlo desde la ventana de un segundo piso al vacío. El arrestado está acusado de un delito de tentativa de homicidio. Los hechos se remontan al pasado domingo sobre las siete de la mañana. Una llamada alertó a los agentes de la Policía Nacional de la presencia de una persona tendida en el suelo sangrando de forma abundante por la cabeza. La víctima es un español de 38 años.

Varias patrullas de la Policía Local de Palma y de la Policía Nacional acudieron al lugar del suceso y se encontraron a la víctima tendida en el suelo inconsciente, con un charco de sangre en la cabeza y unas tijeras junto al cuerpo. Con suma rapidez, una ambulancia del Servei d’Atenció Mèdica Urgent (SAMU-061) atendió al paciente y lo trasladó de urgencia hasta el hospital de Son Espases. Desde el pasado domingo, la víctima permanece ingresada en estado crítico en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI).

Junto al agredido y a las personas que se encontraban en ese momento en la vía pública, según informa la Policía Nacional, se encontraba un hombre, morador de la vivienda de donde se había precipitado el español, el cual contó diversas explicaciones contradictorias, concluyendo que el varón se encontraba en su domicilio y se había caído por una ventana. Uno de los testigos manifestó a los agentes que se encontraba en su domicilio durmiendo y tras escuchar una pelea se asomó al balcón, observando como la víctima estaba apoyado en la barandilla agarrándose con las manos a la misma cayendo de cabeza como si alguien lo hubiese lanzado desde el interior.

El morador manifestó que su novia se encontraba en el domicilio en el momento de la pelea, y que él después se marchó. Ella se personó en comisaría, explicándole a los agentes que había conocido a la víctima esa misma noche y que lo había invitado a pasar la noche en casa. Cuando su novio se despertó y se percató de la presencia de otro hombre en casa, sufrió un ataque de celos, cogió una cadena y le asestó una brutal paliza. Una vez que lo tenía en el suelo, prosiguió con su ataque indiscriminado hasta que consiguió tirarlo por la ventana.