Policía Judicial de la Guardia Civil en la vivienda donde sucedió el crimen. | Michel's

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En el número 58 de la calle França de s'Arracó, en Andratx, los gritos, amenazas y peleas estaban a la orden del día. Dos de sus inquilinos, un guatemalteco de 44 años y un argentino, de 29 años, estaban siempre a la gresca. Cualquier motivo, aunque fuese banal, era motivo suficiente para iniciar una discusión e incluso llegar a las manos. Los vecinos de la zona nunca pudieron presagiar este trágico desenlace y están totalmente conmocionados por la noticia. «Es un drama. S'Arracó es un núcleo muy pequeño y todos nos conocemos. Hay que saber divertirse sin necesidad de beber tanto. Luego pasan estas cosas», apunta Magdalena, una vecina de toda la vida.

Durante toda la mañana de ayer, agentes de la Policía Judicial de la Guardia Civil acudió al domicilio donde sucedieron los hechos para realizar una reconstrucción, recabar pruebas y con la luz del día realizar un completo álbum fotográfico de la escena del crimen. A falta de confirmación oficial, la versión que ofrecen los vecinos coincide plenamente con la principal línea de trabajo de los investigadores del instituto armado. Todo apunta a que víctima y agresor iniciaron una discusión por un motivo de convivencia y que la gran ingesta de alcohol de ambos complicó las cosas. La víctima, de 29 años, que murió apuñalado con un cuchillo de cocina de grandes dimensiones en el tórax, trabajaba de camarero en dos conocidos bares de la comarca.

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Todo sucedió en el interior de la vivienda. Por causas que se desconocen y que son objeto de investigación, dos hombres que son compañeros de piso comenzaron a discutir. En un momento dado, la discusión fue adquiriendo un tono más elevado hasta que ambos llegaron a las manos. Uno de ellos cogió un cuchillo y le asestó una puñalada al otro en el pecho. Todo apunta que ambos iban bastante perjudicados por la gran ingesta de alcohol.

En ese instante, la víctima salió del portal con la mano en el pecho tratándose de taponar la herida sangrante con la intención de pedir ayuda. Durante el trayecto fue dejando un reguero de sangre y marcas por las paredes de la calle. Una patrulla de la Policía Local de Andratx encontró al herido y corrieron en su auxilio. Rápidamente, los agentes solicitaron la presencia de una ambulancia del SAMU-061 y de sus compañeros de la Guardia Civil. Por una parte, los facultativos desplazados trataron de estabilizar al paciente, pero las lesiones que presentaban eran de tal gravedad que no se pudo hacer nada por salvar la vida del paciente. Unos minutos más tarde, falleció.