¿Qué ha supuesto para ustedes este caso?
— Ha sido una sorpresa, no nos lo esperábamos de ninguna manera. Este tipo de prácticas no pueden existir en ningún lugar y mucho menos en un santuario. El nuevo equipo, que llegamos hace tres años y medio, tiene muy claro una ruta de trabajo y un plan estratégico de lo que tiene que ser un santuario. La gente que se apunte a esta forma de trabajar, adelante, pero los que no se apunten se tendrán que bajar del barco. Y esta fue una manera de bajarse.
¿Sospecharon en algún momento del jefe de mantenimiento del santuario?
— Esta persona hace tiempo que tenía una comportamiento que no nos acababa de encajar, pero nunca pensamos que pudiera llegar a este tipo de comportamientos. Tú intuyes cuando una persona es auténtica o lleva a cabo su trabajo con responsabilidad. Enseguida te das cuenta si tiene las cualidades que pensamos que debe tener un jefe de departamento. Es verdad que hace un tiempo que lo marcábamos diciéndole que queríamos que trabajase de una forma determinada porque ya tenía comportamientos que no nos acababan de gustar.
¿Han hablado con él?
— No hemos tenido tiempo. No queríamos hablar con él en mitad de este proceso, no queríamos que sospechara.
Un visitante descubrió que las joyas que se exhibían no eran las originales.
— Cambió la composición de las vitrinas y gracias a esta persona fue el inicio de la investigación.
¿Saben por qué lo hizo?
— Es la gran pregunta que nos hacemos. No lo sabemos. Era una persona que en su casa estaba bien y no tenía una necesidad evidente. Si después llevaba otra vida... no lo sabemos, pero no es una cuestión de dinero. Tenía un sueldo elevado. Era una persona aparentemente normal que contaba con la confianza del equipo del santuario. Esta persona necesita perdón y compasión.
¿Ya le han perdonado?
— Sí, desde el primer momento. Ponernos en la piel de lo que está viviendo nos ayuda a comprender el dolor que padece.
18 comentarios
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@peptoni, ya sabemos que el ladron no era cura, pero te acuerdas del Prior, de Lluch, que antes, habia estado en La Real, recaudo miles de euros por las tejas, que ofrecieron miles de mallorquines, que control habia, ninguno,luego resulto que tambien era pedrastra, enfin que donar dinero a esta gente, es como si lo tirasemos al mar, por un honrado hay muchos que estan aconstumbrados a meter mano en la caja, yo si tengo que ayudar a alguien, se lo doy en mano, ni Caritas ni Carotas.
Del barco de Chanquete no nos moverán Del barco de Chanquete no nos moverán Del barco de Chanquete no nos moveran Es increíble .....el dicho de ese homo que dixo...quien viva mucho muchas cosas verá, Empanadas de meeeeee i dulces de cabello de ángel...lo típico de estas fechas ayudan a digerir y reflexionar, que está semana santa ya sin restricciones sea una buena señal para este mundo tan desigulatario ...esperemos que el nuevo mundo que nos espera a partir de la semana que viene sirva para desacreditar a Nostradamus.....que si no.........
Quien roba a un ladrón 100 años de perdón
No me creo nada de lo que dice éste Prior, el en sus declaraciones, primero dice una cosa y después se contradice, los pecados se pueden perdonar, los robos se juzgan y castigando.
RebeldeEl ladron no era cura... que tiene que ver una cosa con la otra?? Lo que queda claro es que tendran que llevar un mejor control de lo que tienen.. y cada año una auditoria...
Tiene su lógica que de cada vez más pierdan adeptos. Son tan hipócritas que provocan arcadas.
Entre curas anda el juego, de pequeños abusaban de nosotros, y no podias denunciarlos, a ti te expulsaban del Colegio, y el seguia ejerciendo su labor pastoril, antes eran asi y ahora meten mano a la caja, esto no cambia, de aqui 2 dias lo veremos de reponedor de Lidel.
Com se li nota el "postureo". XD
Cap amuntHombre, tampoco es eso. Que el prior no es Dios, no está en todos lados. Y el presunto ya se debía cuidar que no hubiera nadie cerca.
Este suceso me hace recordar, un caso similar, el jefe de matenimiento de electricidad de La Catedral de Santiago, lo que este hombre robo millones durante mas de 30 años, y los encontraron, escondidos en la propia Catedral, tambien se trataba de una persona de maxima confianza, esto ha pasado en muchisimas empresas. Cuando llevan muchos años en la empresa, cogen confianza, y se creen mas vivos que los demas.