Bartolomé Cursach, a su llegada a la sesión de ayer del juicio en la Audiencia Provincial. | ALEX SEPULVEDA

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Las acusaciones buscan levantar algo el vuelo en la jornada de hoy del juicio del 'caso Cursach' con la testifical de dos agentes de la Policía Local fundamentales durante la investigación. Los dos hermanos Gómez están citados esta sesión. Ambos aportan dos de los datos clave de lo que queda de las acusaciones contra Cursach: en primer lugar la reunión en 2007 en el despacho del jefe de la policía Joan Mut a la que también asistió Bartolomé Sbert, entonces número dos del Grupo Cursach y en la que se abordó un acta de sanción que se había incoado contra Megapark. El otro hecho tiene que ver con el supuesto aviso de una inspección realizado por parte del jefe de la Patrulla Verde, Gabriel Torres, al director de Tito's, Jaume Lladó y que fue grabado por los testigos. La Fiscalía no acusa por este dato y Torres alegó que no fue un aviso sino que ya se había llevado a cabo la inspección y que solo se informó de una comprobación posterior.

Fin del testigo

El testigo ha terminado. El fiscal concluye. «Nos han dejado sin prueba de acusación. No existe nada»

Relación con Subirán

El policía ha sido preguntado por su relación con Subirán: «Se quiso poner en contacto con mi hermano. Nos preguntó si teníamos algún tipo de coacción o nos amenazaban. A raíz de eso nos llamaba de forma habitual cuando tenía una inquietud sobre nuestra seguridad y la suya propia. Se fue volviendo muy inestable, al principio era una persona normal. Tenía una actitud muy inestable en la relación».

Cena pagada por Cursach

El testigo afirma que Cursach invitó a la Patrulla Verde a una cena: «El coste del menú eran 25 euros, cuando finalizamos la consumición nos dijeron que estábamos invitados. Éramos 18 o 20 personas. La mitad no quisimos y pagamos y la otra mitad no pagó». «Las invitaciones eran bastante comunes a un grupo de policías». «No puedo concretar que la invitación viniera de Cursach».

"Nunca me habían ordenado cambiar un acta"

El testigo también alude a un episodio de 2007 a preguntas del fiscal. Por una orden judicial acudieron a inspeccionar el local Don Quijote, que tenía una orden e hicieron varias actas. El lunes siguiente fueron interpelados por el jefe del cuerpo, Joan Mut y el jefe de la Patrulla Verde para que modificaran esas actas. No ha sido capaz de explicar en qué sentido y se le ha advertido que no suponga el por qué.

Aviso a Tito's

El primer de los testigos, Juan Miguel Gómez, asegura que se avisó a Tito's de una inspección de aforo. «Querían involucrarme». Recuerda que fueron a la una y media, cuando el local estaba vacío y que el jefe de la patrulla, el acusado Gabriel Torres y él entraron. «La sensación que tenía de que me estaban haciendo una encerrona es que Torres estaba preguntando y me pidió que fuera con él. Nos metieron en una habitación insonorizada y estaba el señor director de titos una persona de seguridad y biel torres. Le dice que hay dos maneras de hacer las cosas, una la que usted se merecen que es decir que vendremos a las tres de la madrugada y otra es venir sin avisar».