El temerario conductor adelantaba en zonas prohibidas sin importale su propia seguridad o la del resto de usuarios de la vía. | Guardia Civil

TW
39

Agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil han imputado un delito contra la seguridad vial al conductor temerario de la Serra de Tramuntana que viralizó sus 'hazañas' en las redes sociales. El investigado circulaba por la carretera de la Serra, en el tramo comprendido entre Banyalbufar y Esporles, realizando adelantamientos de manera temeraria en línea longitudinal continua y derrapando al trazar las curvas. Para ello, no dudaba en invadir el sentido contrario por donde circulaban otros vehículos. Para la Benemérita, se trata de un total desprecio por la vida propia y los demás usuarios de la vía.

Con esta importante actuación policial, se intenta poner freno a un problema que se arrastra desde hace décadas, cuando se iniciaron las carreras ilegales o las conducciones temerarias de motos, con velocidades límite rebasadas, adelantamientos ilegales, situaciones de peligro y, además, un estruendo continuo impropio en un espacio natural de alto valor. La carretera de Tramuntana, la llamada Ma-10, que va de Pollença a Andratx a lo largo de algo más de cien kilómetros, es una vía pública de comunicación en un entorno privilegiado.  Sin embargo, para algunos no es más que un espacio de ocio, una especie de parque de atracciones en el que la diversión particular está por encima de cualquier norma e incluso de la seguridad de los demás.

De las carreras ilegales de motos se ha pasado ahora a la conducción temeraria en coches, tal como se ha demostrado en un video reciente colgado en redes en el que se ve un vehículo BMW realizando todo un repertorio de infracciones, básicamente adelantamientos en curva y en recta (todos ilegales, puesto que siempre hay una línea continua entre carriles), exceso de velocidad y maniobras de derrapaje.

Nada más viralizarse el vídeo, fueron muchas las personas que aportaron a la Guardia Civil los datos del conductor. De hecho, no tardaron en circular imágenes de su coche estacionado junto a una empresa de reciclaje de la Isla.