Policía Local de Andratx y sanitarios del SAMU-061, trasladando al turista francés de 9 años en camilla hasta la ambulancia.    | Michel's

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Un turista de nueve años de edad y nacionalidad francesa se precipitó ayer desde una altura de unos cuatro metros cuando intentaba pasar de un balcón a otro en Andratx.

Los hechos tuvieron lugar al mediodía de este miércoles en el Aparthotel Don Camilo, ubicado en la calle Cala es Conill número 5 de Sant Elm. Sobre las 13 horas, el pequeño se encontraba en una de las habitaciones y, a falta de confirmación oficial, las primeras hipótesis apuntan a que el niño se encaramó a la fachada para pasar de un balcón a otro y se cayó.

Con suma rapidez, agentes de la Policía Local de Andratx, Guardia Civil, y dos ambulancias medicalizadas activadas por el Servei d’Atenció Mèdica Urgent (SAMU-061) acudieron al lugar para auxiliar a la víctima. También acudió el socorrista de la playa para realizar las primeras atenciones hasta la llegada de los médicos.

Asistencia

A su llegada, se encontraron al turista tendido en el suelo muy dolorido junto a sus padres que no daban crédito de lo que había sucedido. Los facultativos desplazados hasta el complejo hotelero consiguieron estabilizar al paciente. Debido a la orografía del lugar, la ambulancia tuvo que acceder por un camino de difícil acceso ubicado delante de la torre. Con ayuda de una camilla semirrígida, el personal sanitario consiguió trasladar al paciente por el interior de una zona boscosa hasta llegar a la ambulancia.

Una vez allí, los médicos ordenaron el traslado urgente del menor hasta un centro hospitalario de Palma. Las primeras valoraciones facultativas señalan de que el niño presentaba varias fracturas y policontusiones por todo el cuerpo.

A pesar de que no se teme por la vida del paciente, la caída provocó un fuerte traumatismo craneoencefálico y posibles lesiones internas. El paciente está pendiente de pruebas y su pronóstico es estable dentro de la gravedad.

La Guardia Civil se hace cargo de la investigación

Nada más producirse el accidente, agentes de la Policía Judicial de la GuardiaCivil se desplazaron al lugar para hacerse cargo de la investigación de lo sucedido. Los investigadores detectaron que el cuerpo del niño fue movido del lugar de la caída, pero fue porque los padres lo cogieron. Los servicios sanitarios sostienen que los heridos jamás deben moverse del lugar del suceso salvo que peligre su vida.