Patrulla de la Policía Nacional. | Alejandro Sepúlveda

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Tiene más de 40 condenas a sus espaldas por robos, pero le da igual. Sigue delinquiendo. Un hombre se enfrenta a una pena de un año y medio de cárcel por robar en un concesionario de Palma e intentarlo en una escoleta. El acusado, de 49 años y nacionalidad española, deberá indemnizar al establecimiento de compraventa de vehículos con 925 euros por los efectos sustraídos –tres teléfonos móviles y una tablet–.

Los hechos por los que será juzgado próximamente tuvieron lugar en las primeras horas del 5 de septiembre de 2020. El delincuente se dirigió a la calle Aragón, donde se encuentra el concesionario, y se apoderó de tres móviles y una tablet, todos de la marca Samsung.

Los objetos, que han sido valorados en 925 euros, estaban en el interior de la nave del taller del local y habían sido adquiridos por la empresa en los meses de febrero, marzo y agosto del año pasado.

A primera hora de la mañana del 22 de septiembre, el procesado fue a una escoleta de Palma y, aprovechando que no estaba cerrada con llave, accedió al interior. La propietaria del centro sorprendió en su despacho al delincuente hurgando entre sus efectos y el hombre huyó.

Detención

Ese mismo día, el sospechoso volvió a actuar en el concesionario. Alrededor de las 9.45 horas, acudió a los boxes de limpieza de la nave y robó la cartera de un empleado, que contenía su documentación y 30 euros en efectivo. Los trabajadores del establecimiento sorprendieron y retuvieron al ladrón hasta la llegada de los agentes de la Policía Nacional, que procedieron a su detención.