Imagen de archivo de la 'Madame' del caso Cursach de camino a los juzgados de Via Alemania. | Alejandro Sepúlveda

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A prisión. Un juzgado de Palma ha ordenado que la testigo protegida número 31 del ‘caso Cursach’, la polémica 'madame', ingrese en la cárcel por no pagar un multa a la que fue condenada por apropiarse de dinero.

El juzgado de lo Penal número 8 de Palma (ejecutorias) ha dictado un auto en el que «se deniega la suspensión de la ejecución de la pena privativa de libertad por cuanto que la penada a pesar de tener plena solvencia real para el pago de la pena de multa impuesta por el delito de denuncia falsa, 720 euros, no ha realizado el más mínimo esfuerzo para su pago, lo cual pronostica falta de disposición personal para rehabilitarse de su delito», refleja la magistrada en su escrito.

Pago voluntario

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Por ese motivo, «agotado el plazo de pago voluntario y la vía de apremio sobre la pena de multa impuesta en sentencia, procede imponer a la penada dos meses de responsabilidad personal subsidiarios por impago de multa».

En julio de 2018, un juzgado de Palma impuso una pena de ocho meses de cárcel y una multa de 720 euros por los delitos de apropiación indebida y de denuncia falsa a la ‘madame’. La magistrada considera que la testigo protegida 31 se apropió de más de 900 euros del burdel El Globo Rojo cuando era empleada de una compañía de seguros. Después, para encubrir ese fraude, presentó una denuncia falsa contra la encargada del establecimiento. Los hechos se produjeron en el año 2015. La ‘madame’ entonces trabajaba en una compañía de seguros. En ese tiempo decidió contratar una prima para el local. Sin embargo, los dos pagos que le hizo la responsable, uno de 400 y otro de 500 euros en efectivo, nunca los ingresó en la empresa sino que se los quedó.

Cuando la víctima descubrió el engaño, la reacción de la testigo fue presentar una denuncia contra ella por amenazas. Afirmó en un juzgado que, en realidad, había prestado 4.500 euros a la responsable de El Globo Rojo y que, cuando le reclamó el dinero, ésta le dijo que «los que destrozaron el local pueden destrozarte tu cara y la de tu hijo». La magistrada concluyó que estos hechos eran falsos. La denunciante estuvo representada en el juicio por el abogado Vicente Campaner. La 'madame', por su parte, mantuvo en todo momento su versión, incluso negó haber sido despedida por estos hechos pese a la constancia documental. La jueza le condenó.

La 'madame' ha sido una testigo clave para el juez Penalva y el fiscal Subirán y gran parte de sus acusaciones en el ‘caso Cursach’ se basaban en informaciones de esta mujer. Ultima Hora siempre puso en duda la veracidad de esas versiones y finalmente la Policía Nacional desmontó a la 'madame' en un demoledor informe en el que confirmó que era una «mentirosa compulsiva».