Uno de los detenidos, en julio de 2016, custodiado por agentes de la Policía Nacional. | Alejandro Sepúlveda

TW
1

La cocaína la enviaban en tuppers desde Valencia como si fuera comida. El clan de ‘Los Valencianos’ introdujo droga en Mallorca en 2016. ‘El Cuco’ y su hijo, conocido como ‘El Cuquín’, constituyeron una banda organizada que la Policía Nacional desarticuló tras la ‘operación Tarántula’ en la que participaron un centenar de agentes.

La Audiencia Provincial de Valencia ha condenado ahora a once miembros de la red. Los acusados, en el juicio celebrado la semana pasada, aceptaron penas que suman 42 años y cuatro meses de cárcel y multas que superan los 652.000 euros por delitos contra la salud pública, pertenencia a grupo criminal, tenencia de armas prohibidas y falsificación de tarjetas de crédito.

Los narcotraficantes reconocieron que se dedicaron a introducir y distribuir cocaína en Mallorca desde Sagunto entre enero y julio de 2016. ‘El Cuco’, cabecilla y patriarca, actuaba tanto en Mallorca como en la localidad valenciana, donde contactaba con proveedores y gestionaba los envíos. ‘El Cuquín’ era su lugarteniente y obedecía órdenes. Un hombre aprovechaba la infraestructura de su empresa de venta de pollos para colaborar con padre e hijo en los envíos de la droga a la Isla. Era la persona encargada de enviar los paquetes. Los otros encausados recogían la cocaína cuando llegaba a su destino.

El 6 de abril, sobre las 07.55 horas, la Policía Nacional interceptó un paquete en las instalaciones de una empresa de la calle Gremi Saboners. En su interior hallaron un tupperware con tapas azules que contenía un kilo de cocaína. Uno de los integrantes de la red, de origen chino, se dedicaba a falsificar documentación para enmascarar el tráfico de droga.

Los agentes, en el registro del domicilio de ‘El Cuco’ y su hijo el 5 de julio en Sagunto, encontraron una pistola semiautomática y 8.550 euros. El arma, que había sido modificada, pertenecía a ‘El Cuquín’ y estaba prohibida.

Los policías hallaron tres kilos de cocaína enterrados en una finca rústica de la urbanización Son Olivaret, en Sant Jordi. La Policía Nacional utilizó excavadoras en una zona de pinar cercana a una de las viviendas para dar con la droga. El clan de ‘Los Valencianos’ ya era historia.